¿QUÉ VIENE?
Por: Sean Osmin HAMUD RUIZ
¿Se pueden hacer las cosas bien desde el gobierno? ¿Hay posibilidades de encontrar resultados concretos y positivos en un ejercicio gubernamental? ¿De qué dependen las respuestas a los anterior?
A las primeras dos preguntas se puede contestar en sentido afirmativo, como reza el clásico ¡si se puede!
La respuesta a la tercera depende de varios factores, pero todos ellos alcanzables y realizables.
A finales de junio del año pasado publiqué una reflexión respecto a un anuncio que en aquel momento se hizo respecto a fondos históricos que se colocarían a través del SEFIDEC, destacando lo importante de esa información y deseando que tuviera buen puerto.
En días pasados, la junta de gobierno de este organismo se reunió y se dieron a conocer resultados, todos comprobables, del trabajo realizado hasta ahora.
Se genera mucha información en este tipo de reuniones, pero me voy a permitir destacar algunos apuntes que me parecen de los más relevantes.
En lo que se refiere a créditos directos otorgados por este instituto en el 2022, respecto a 2021 se dio un incremento del 18%, pero en comparación con 2020 fue del 62%. Un resultado sumamente interesante si tomamos en cuenta que todavía la economía en general viene arrastrando los efectos de la pandemia y de otros factores que no han permitido un despegue del todo adecuado de la economía para sentirnos tranquilos al respecto. Vale mucho la pena resaltar que el mercado objetivo para la colocación de estos recursos son las micro y pequeñas empresas principalmente. Es ir a las unidades económicas más pequeñas, que regularmente son aquellas que, por sus intrínsecas características, se les complica acceder al crédito o bien, cuando lo consiguen, generalmente es caro el interés que deben pagar. Uno de los objetivos primordiales de SEFIDEC es ofrecer dinero en las mejores condiciones de mercado posibles.
Acciones que han permitido que esta colocación de metálico sea exitosa, sin duda es la flexibilización de la metodología que han implementado. Ahora técnicos calificados se sientan con el/la empresario(a) en cuestión y juntos analizan la información del flujo de la empresa, visualizando aspectos más íntimos de la operación de la misma, que han permitido conocer mejor la situación particular de cada negocio y sobre todo, en este entendimiento, crear oportunidades para realmente poder ser ayudados. Una consecuencia inmediata de este ejercicio es que se ha determinado que se generarán programas de capacitación dirigidos a la Mipymes con la intención de que mejoren su administración, su generación de información financiera y ello tenga como consecuencia el fortalecimiento de su negocio.
Un dato también interesante es el incremento del 26% de créditos colocados con empresarias mujeres, revelando la cada vez mayor relevancia del poder de la mujer en la economía formal.
Un indicador más. Hoy los ingresos netos de esta oficina ya le permiten cubrir todos sus gastos de operación, lo que significa que, además de ser auto sustentable, cada peso que se transfiera del presupuesto estatal a su fondeo, es recurso disponible para aumentar los créditos colocados. Nóminas y demás ya no dependen de las asignaciones presupuestales, una situación añejamente deseada.
Y para rematar, en la industria del crédito a Pymes, lo regular es tener cartera vencida promedio del 3%, en microcréditos, del 8% en general. Sefidec tiene menos del 1% de sus créditos con problemas de cobranza. Se puede confiar en los pequeños empresarios locales, pero también en la gente que trabaja en el análisis y aprobación de estas colocaciones.
Entonces si, se pueden hacer bien las cosas. Y es consecuencia de que todos esos afanes han buscado los resultados como su único ENFOQUE.
