Luego de participar en el foro “Economía Verde, retos y Oportunidades para México”, organizado por el Tecnológico de Monterrey, detalló que dicho reto implica diseñar políticas públicas para producir 50% más alimentos que los que se producen actualmente, pero con la misma cantidad de tierra y agua en los próximos 18 años.
“Ese es el tamaño del reto y es a lo que nos estamos enfocando las organizaciones dedicadas a estos temas, estamos buscando soluciones que sirvan para ese lapso de tiempo”, indicó.
El también director general de la gigante panificadora, comentó que, en particular este año, la inusual sequía que afecta a Estados Unidos ha impactado a los precios de commodities; sin embargo, descartó que en el corto plazo sus productos registren un aumento de precio.
“En la empresa tenemos compras de futuros pero una vez que estas compras de futuros de commodities se terminen ajustaremos nuestros costos en función de los precios que en ese momento tenga el mercado”, dijo.
“El tema de la crisis alimentaria es un gran reto para la humanidad, nosotros pensamos que la solución debe de involucrar a gobiernos, productores, empresas y consumidores” sostuvo Servitje quien dirigió, junto con Paul Polman de Unilever, los trabajos del B-20 sobre el tema de seguridad alimentaria.
Sobre la posición que debería de adoptar la administración entrante con respecto a este tema, mencionó la conveniencia de adoptar las propuestas del B-20, “hay muy buena apertura y buena escucha del equipo de transición para entender en dónde estamos parados y qué es lo que se plantea por los distintos organismos”, subrayó.
Dentro de las recomendaciones de los grupos de trabajo de seguridad alimentaria del B-20 se detalla que los sectores que representa el grupo de apoyo planean invertir entre 10 y 15 mil millones de dólares adicionales, expandiendo así el acceso al mercado de insumos para 3 a 5 millones de pequeños agricultores, así como mejorar los ingresos y la productividad de 2 a 3 millones de mujeres agricultoras.
Además, los gobiernos deben incrementar en la misma proporción que el sector privado, sus inversiones en agricultura para ayudar a aumentar la producción y la productividad también en 50% para 2030, así como para mejorar el sustento de los pequeños agricultores.
Con información del Universal
