Por Edgar Cazares
*Se veía venir y lo habíamos adelantado: En MORENA Colima y aliados era claro que algunos de los no elegidos como candidatos a la gubernatura no iba a quedar conforme con los resultados que se obtuvieran.
Así ha sucedido en el pasado y no veía razón alguna para que la ecuación variará. Y así fue. No solo debemos tener en cuenta la molestia –mezcla de berrinche también- de Claudia Yáñez sino además también, aunque menos elocuente, de Griselda Valencia, y ya antes de alguien que quería ser abanderado –con méritos propios- de la coalición, Joel Padilla.
Y siendo sinceros salvo las intentonas, de palabra, de la dirigencia nacional del partido dominante no he visto la menor intención de la fórmula ganadora ya no digamos por hacer las paces por quienes no fueron favorecidos por el método de selección interna sino siquiera por emprender la ya famosa operación cicatriz.
Es notorio que entre el proyecto de Indira Vizcaíno, seguidores incluidos, y el de Claudia Yáñez había un divisionismo que va más allá de la interna en mención. Pero en estas circunstancias y tomando en cuenta que hoy día ya no basta la camiseta para ganar una elección la cabeza de los Indilovers se está tardando en tratar de construir un puente de diálogo con sus rivales.
Podría decirse que es su obligación tejer alianzas primero con los que nominalmente son sus compañeros de causa. Porque si no es capaz de construir con quienes le rodean que pueden esperar sus rivales más allá de su partido o los ciudadanos que no coinciden con ella.
De eso se trata también la política: de convivir sanamente con quienes te aplauden todo sino tratar de establecer un vínculo de respeto, cordialidad y acercamiento con quienes en algún momento dado y circunstancias entendibles –o no entendibles-son críticos o rivales.
Independientemente de las posibilidades que tenga hoy día el proyecto de MORENA a la gubernatura mal empieza. Comienza pues con señales que no son nada buenas para el ciudadano
*Aún cuando el PRI en Manzanillo aparentemente tienen más cuadros para enfrentar las elecciones locales el tema de la alianza con PAN y PRD hará que algunas cosas no salgan conforme lo previsto para algunos tricolores que habían movido sus fichas con antelación –y claro con la válida intención de aspirar a un puesto de elección popular-: todo pinta sí, para que el candidato emane de las filas del tricolor pero, a cambio, 3 de las 4 posiciones a diputados locales corresponderán a figuras del blanquiazul.
Solamente el distrito XII sería territorio disponible para el priísmo –donde todo pinta que el regidor Carlos Zepeda sea el ungido-. Habrá que estar a la espera de reacciones.
*Y en este tenor cabe hacer una pregunta importante ¿de dónde sacará el blanquiazul Manzanillo figuras y proyectos exitosos para llenar esas expectativas en los distritos –XI, XIII y XIV- que nominalmente les corresponde en la citada coalición? la caballada está flaca y la competencia será durísima.
Más aún tomando en cuenta que algunos cuadros distinguidos del panismo porteño están en la nómina del ayuntamiento porteño, pintado por cierto de los colores de la 4T.
APUNTES DESDE LA COSTA
*Las malas noticias se resisten a abandonarnos. El fin de semana lamentablemente perdió la vida Edison Solís, uno de los comunicadores radiofónicos más influyentes del estado en las últimas décadas.
A Edison lo conocí tanto en el terreno profesional como en el personal y créame, estimado lector, que es una pérdida que me duele mucho. Una luz que se apaga prematuramente cuando aún tenía mucho por brindar.
Pero así es el ciclo de la vida y de la muerte: lo único que tenemos seguro una vez naciendo es, paradójicamente, la muerte. Lo malo es que no sabemos cuando tenemos que partir de este mundo. Y cuando alguien querido se marcha por siempre duele. Y en el caso de Edison su partida significa un dolor indescriptible. Descanse en paz.
*Hoy justamente hace 7 años recibí una de las mejores noticias en toda mi vida. Aunque sonaba a broma –pero evidentemente y gracias a dios no lo fue- hace justamente 84 meses me enteré de la inminente llegada a este mundo de mi aún pequeño Rod, el orgullo de mi nepotismo.
El anuncio, enmarcado por cierto escepticismo puesto que el 28 de diciembre es día de los santos inocentes, me generó una mezcla de emociones, algunas indescriptibles: significó pues de una nueva etapa en la vida, una que yo esperaba con ansias, ya que ser padre se había convertido en una de mis prioridades por aquellos años.
Y claro ser papá de un infante tan dinámico, desinhibido, cariñoso y mejor aún excepcionalmente sano como el mío sigue siendo una deliciosa prioridad.
Aquel día hubo pues mucha emoción y, tengo que admitirlo, por primera vez supe genuinamente lo que era llorar de alegría.
No quise dejar pasar la ocasión para compartir ese momento de felicidad con ustedes, amables lectores, y que en un futuro lejano o cercano –uno nunca sabe- el pequeño Rod pueda consultar la hemeroteca y saber no solo cuanto lo amo sino cuan deseado y bien planificado fue.
Con la ayuda de Dios y la generosidad de su mamá ese deseo llegó y aquí me sigue acompañando. Verlo crecer es un privilegio además que me inspira y me motiva a tratar de dar lo mejor de mi día con día.
Gracias por su fina atención. Comentarios a edgar.cazares.afmedios@gmail.com