Manzanillo – Fue habilitada un 29 de diciembre del 2006 como la cúspide de un proyecto escultórico que planteaba generar mayores atractivos en los primeros cuadros de la ciudad. Hoy a casi 10 años no sólo ha sido presa del vandalismo y la rapiña, sino además ha sido completamente mancillada al grado de lucir casi irreconocible: se trata de la figura del vigía, ubicada en la plaza del mismo nombre, en la cumbre del barrio conocido como Sector 1.
Al respecto César Ibarra, vecino de esta colonia, expuso que el citado mirador –conocido como Plazoleta de los Vientos- está alejado de las viviendas por lo que es presa fácil de los ladrones y de los propios vándalos lo que, aunado a la nula vigilancia y mantenimiento de este espacio, han propiciado su ruina paulatinamente.
Recordó que luego de la colocación de la figura y adecuación de los accesos hacia ésta formó parte de recorridos turísticos incluso fue objeto de admiración de los visitantes de cruceros quienes, llevados por un guía, disfrutaban del lugar, de su impresionante vista –se puede divisar desde ahí gran parte de la bahía central- y de su infraestructura cultural.
Hoy día a dicha escultura de bronce le han cercenado los dos brazos –en uno de ellos portaba un banderín- y de paso le fue arrebatada una especie de binoculares que portaba al pecho. En la base había una placa conmemorativa que también fue presa fácil de los ladrones.
“De eso ya nada más queda el recuerdo, los vecinos hemos hecho un esfuerzo por conserva este espacio pero nos es difícil porque el mirador queda retirado de las casas, hemos pedido el apoyo al municipio pero sabemos que les es difícil también, el lugar es más distante de cualquier acceso aún… hemos tratado de platicar y hacer conciencia entre quienes visitan, de la importancia de esa infraestructura de lo mucho que representa para nosotros el mirador pero no se ha podido evitar su deterioro”, lamentó.
Cabe recordar que este sitio fue inaugurado el 29 de diciembre del 2006, auspiciado por el Gobierno de Silverio Cavazos; ese mismo día también fue habilitada la figura “Cazadora de estrellas”, ésta última en el Malecón del espíritu Santo. Entre ambas, se informó en aquella ocasión, se hizo una inversión de 500 mil pesos.
El autor de estas piezas, en tamaño natural, fue el escultor jalisciense Rubén Hernández Guerrero. En aquella ocasión se dio a conocer que “El Vigía” representa al vigilante que desde el faro alertaba de la llegada de los barcos, identificándolos con diferentes tipos de banderas que ondeaban, según la procedencia de las naves que arribaban, por lo que se trata de un personaje muy importante para la historia de Manzanillo.
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