Colima.- Esta semana la alcaldesa de Manzanillo, Gabriela Benavides Cobos, estuvo en la Facultad de Comercio Exterior de la Universidad de Colima, para platicar con estudiantes de ese plantel respecto a la administración pública, la relación puerto-ciudad y otros temas vinculados con los servicios, la seguridad y equidad de género.
Primero, les dijo a los asistentes que ser presidenta es una gran responsabilidad, no sólo por el gran movimiento de carga que existe en el puerto sino por el trabajo de gestión que debe hacerse para generar las condiciones y servicios que requiere el desarrollo social.
Respecto a los beneficios que genera el puerto, mencionó los empleos; sin embargo, dijo, “no existe una distribución equitativa, ya que el municipio sólo recibe un porcentaje de los recursos, al tratarse de una asociación privada”.
Añadió que se trata de empatar este desarrollo con el crecimiento de la ciudad y con la voluntad y buena legislación para solucionar muchas necesidades.
Dijo que es obligación del municipio dar servicios a los más de 150 mil habitantes y que se trata de solucionar los principales problemas viales, mejorar la imagen urbana y el acceso a Manzanillo; no obstante, comentó que muchas veces existe preocupación sólo por el paso de vehículos y se descuidan los accesos peatonales, lo que es una falta de cultura al no dejar libres los accesos, sobre todo para las personas con discapacidad.
Además, aseguró que la equidad de género es muy importante en la administración pública, ya que de los 10 municipios colimenses sólo dos están regidos por mujeres; “se ha avanzado, aunque desgraciadamente se tiene que estipular en la ley para que se abran estas puertas”, afirmó.
Agregó que es necesario abrir oportunidades a las mujeres en el puerto para que ejerzan como agentes aduanales, pues los titulares y directivos son varones en su mayoría.
“Cuesta mucho hacerse escuchar y ser aceptada en el trabajo; es necesario dejar el paradigma de que una mujer no ayuda a otra mujer”, agregó la alcaldesa de Manzanillo.
En términos de seguridad, externó que Manzanillo no se escapa de la guerra con el crimen organizado: “Es un territorio importante para ellos, por lo que se ha generado una lucha muy complicada que muchas veces pasa a las calles”.
No obstante, recalcó que lo anterior no significa que se haya perdido la seguridad en Manzanillo, sino que “el uso desmedido e irresponsable de las redes sociales lastima al municipio debido a la difusión de información errónea o exagerada: Es necesario verificar lo que se publica y más aún fortalecer el vínculo y la comunicación en las familias, pues es deber de todos, como sociedad, cuidar los unos de los otros”.
“La inseguridad no se acabará con más policías y más armas, pues deriva de una descomposición social; lo ideal es invertir en la prevención de adicciones”, comentó.
Para finalizar, destacó la importancia de impulsar a los jóvenes en lo profesional, para lo cual afirmó que hay muchos estímulos y de diversa índole, como las becas de manutención así como los convenios con la U de Colima para otorgar becas de movilidad. BP