Un barco cargado de gasolina explotó la noche del lunes en las inmediaciones de Lingen, ciudad alemana a orillas del río Ems, donde la policía y los bomberos se esfuerzan en controlar la fuga de combustible ante el peligro de incendio.
El barco transportaba alrededor de 900 mil litros de gasolina y se hundió tras varias explosiones que no afectaron a sus cinco tripulantes, informó la policía de Lingen.
Gran cantidad de la gasolina que llevaba el buque se derramó en esa vía fluvial, que se ubica en el estado federado de Baja Sajonia en el noroeste de Alemania.
La gasolina que se dispersó ocasionó fuego en las aguas delante del puerto, que se ubica en las inmediaciones de una refinería de crudo.
Los bomberos utilizaron espuma especial para evitar que las llamas se expandieran en la superficie del río, pero la mezcla de agua y gasolina continúa incendiándose, por lo que permanecen la alarma.
Tras hundirse una parte del barco carguero se mantuvo fuera del agua.
El tráfico de navíos se suspendió de forma provisional en el canal Dortmund-Ems, y varias avenidas aledañas a la refinería de Lingen tuvieron que ser cerradas durante la madrugada de este martes.
La policía hizo por su parte un llamado a los habitantes de esa región para que mantuvieran cerradas sus puertas y ventanas ante el riesgo de contaminación del aire.
El accidente en el río Ems le siguió a otro en enero pasado en el río Rin, donde un navío carguero con dos mil 400 toneladas de ácido sulfúrico se volcó, con saldo de dos trripulantes desaparecidos.
En ese accidente no se registró ningún derrame, pero un amplio cuerpo de especialistas fue movilizado para impedir una fuga, mienras la vía fluvial permaneció cerrada durante varios días.
Con información de Notimex.