José Manuel Palma García, investigador del Centro de Investigación y Desarrollo Agropecuario (CUIDA) de la Universidad de Colima en Tecomán, y José María Anguiano Soto, colega de Manuel Palma, presentaron al rector de esta máxima casa de estudios, José Eduardo Hernández Nava, un proyecto ambicioso para utilizar los espacios universitarios en la producción de alimentos sin dañar el entorno ambiental.
El proyecto, dicen, tiene como propósito la reutilización de espacios universitarios y la participación de toda la sociedad, así como de estudiantes y trabajadores universitarios.
Es un proyecto, comentó Manuel Palma, “con un enfoque agroecológico, ya que involucra el medio ambiente, la participación de la sociedad, y conlleva aspectos culturales, económicos y políticos, pues todos participaríamos de acuerdo con nuestras capacidades”. Lo que se busca, añadió Manuel Palma, “es el desarrollo de la sociedad obteniendo un suelo sano para tener alimentos sanos y hacer uso de la biodiversidad”.
Otro de los objetivos es que los estudiantes de Agronomía y de Veterinaria tengan el contacto directo con la producción de alimentos y con el mercado laboral desde el primer semestre, “ya que formamos profesionales directamente relacionados con la alimentación. Si nosotros no tenemos las herramientas necesarias para sensibilizar a los muchachos, no estaremos en una condición favorable”, advirtió.
Manuel Palma señaló que éste podría ser un proyecto sustentable, y así retomar el modelo que se tenía en el área agropecuaria de la UdeC. Asimismo, comentó, “el dinero que se invierta podemos recuperarlo mediante un sistema viable. Lo anterior tendría el plus de formar a todos nuestros estudiantes y a la sociedad”.
Antes de concluir su intervención, el investigador de la Facultad de Veterinaria pidió el apoyo del Rector para generar un movimiento que sería el sello característico de la Universidad de Colima, “porque estaríamos utilizando todos los recursos que tiene nuestro Estado, toda su biodiversidad, con un enfoque diferente”.
Y añadió: “Hay una cantidad muy variable de frutos en los campus que podrían ser comercializados, por lo cual generaríamos un movimiento que cambiaría el enfoque; además, nosotros mismos podríamos realizarlo, ya que todo esto puede formar parte de la arquitectura del paisaje del propio centro de trabajo”, culminó.
José María Anguiano habló del aspecto filosófico del proyecto, de lograr entre todos y todas un mejor ecosistema, un mejor clima, y de generar desarrollo sin tener que invertir grandes sumas o destruir los suelos con productos químicos.
Por su parte, el Rector de la UdeC, José Eduardo Hernández Nava, señaló que es un proyecto muy atractivo, por lo que sugirió a los investigadores que le dieran forma para que él pudiera presentarlo a quien fuera necesario y gestionar recursos.
“Es un proyecto en el que podrían participar ampliamente no sólo con las facultades de Veterinaria y de Agropecuaria del campus Tecomán, sino todos los alumnos en general, nuestros trabajadores, el CEDEFU (Centro de Desarrollo de la Familia Universitaria), y así lograr que sea un proyecto transversal”, aseveró.
“Veo un modelo pedagógico que se puede poner en práctica y que será muy útil en el cambio de mentalidad hacia lo que se refiere a la biodiversidad”, concluyó el rector, no sin antes decirles a los investigadores que le interesaría mucho apoyar este proyecto. BP
