Chile.- Tras cinco años de presencia en los mercados mundiales, los dos principales fabricantes de netbooks han decidido dejar de fabricarlo este 2013, por lo que será el último año de producción a nivel mundial.
Lo que nació como una viveza creativa del fabricante taiwanés ASUSTek, quienes se pegaban cabezazos para poder apostar por mayor movilidad de los portátiles y algo más de duración en la batería, lograron en ese entonces presentar un notebook reducido de tamaño (pantallas que partieron en 7” y terminaron con estar de 11”).
Además sin la ayuda de Intel, esta propuesta no hubiese enganchado lo suficiente, pues los chips en ese momento había que adelgazarlos y quitarle ciertas capacidades de consumo y de prestaciones.
Así nació el Atom mono núcleo el cual fue mejorando a medida que las órdenes de netbooks iba “in crescendo”, pero algo iba mal.
La ausencia de unidad óptica, la limitante de no poder conectarlo vía HDMI y la restricción de memoria y de tamaño de disco fueron mermando sus prestaciones y el entusiasmo de los compradores.
En el reino del consumo como EE.UU., y al segundo año en el mercado el 67% de los consumidores consideraba que el netbook era una mala compra, pues no podían ver videos en HD, no permitía jugar (clave para muchos) y otro tanto no podía cargar programas más que vía USB o Pendrive.
Además, para países desarrollados, los netbooks fueron conceptualizados como el “segundo computador de la casa” pero en América Latina y países en desarrollo el valor de entrada de un netbook fue prohibitivo, pues errónamente se vendió la idea de que un kilo menos y más portable debía ser más caro.
Aparte de Asus, Acer, MSI, también se unieron al ruedo las norteamericanas HP, Dell (que en buenas cuentas reventó el concepto sacando netbooks de 7,8, 9 , 10, 11 y hasta 12” lo que obviamente fue confundiendo al eventual comprador.
Otros se dieron cuenta que la BAM los hacía complicados para poder tenerlos en la cama y eso era más un contra que un pro.
Pese a ello y en su mejor momento se vendieron sobre 150 mil unidades en Chile, cifra que hoy es superada con creces por el millón 300 mil notebooks que se estima cerró el 2012 en el país.
A ello se debe sumar la explosión galáctica de smartphones que se comieron al netbook, pues son más livianos, rápidos, pequeños y les entregó las herramientas al usuario para que grabara videos en HD y fotos en 800 megapixeles.
Súmele el Tablet y su simpática-práctica forma de llevar, lo mismo que se podía hacer en un netbook, pero sin que se te acalambraran las manos.
Ahora todos apuntan a cuánto durará la tendencia del ultrabook…
Con información de El Mercurio
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