Por Jorge Arturo Orozco Sanmiguel
Ahora que ya se conformaron todos los puestos de poder: Ejecutivo federal, legislativo federal y local, así como los ayuntamientos, iniciamos la cuenta regresiva de los tres años del mandato morenista en Colima. Es ahí donde viene la pregunta que muchas y muchos nos hacemos actualmente: ¿Qué pasará ahora? Si bien, vemos varias encomiendas de la presidenta Claudia Sheinbaum Pardo, que algunas tienen el nombre específico de Colima, existen otras que son directas de la mandataria estatal.
Veamos primero el escenario: Contaremos con cinco municipios comandados por la alianza Sigamos Haciendo Historia, conformados por el Movimiento de Regeneración Nacional, (MORENA), Partido del Trabajo, (PT) y Partido Verde Ecologista, (PVE) Tres municipios liderados por la alianza Fuerza y Corazón por Colima, integrados por el Partido Revolucionario Institucional, (PRI) y el Partido Acción Nacional, (PAN) y dos presidencias ganados por el Partido Nueva Alianza, (PANAL) el cual actualmente se les denominó “ayuntamientos aliados” por su inserción a la alianza de MORENA, PT y PVE.
Dentro del H. Congreso del Estado de Colima, tenemos una mayoría de la alianza de izquierda conformada por 18 diputadas y diputados, (considerando uno de PANAL recientemente agregado); cinco de la alianza derechista y uno de Movimiento Ciudadano, (MC) Esto nos da una mayoría de la coalición Sigamos Haciendo Historia.
Analizando el escenario a estos días, la mitad del estado será mandatado por la fuerza izquierdista, así como el H. Congreso del Estado. Pero qué podremos ver, nuevamente repito la pregunta.
Lo importante y llamativo fueron sus tomas de protestas. Iniciemos como la ley de la vida nos ha dicho: De izquierda a derecha. Dentro de las conformaciones de los cabildos, observamos algo que en política es una máxima: “se dice mucho lo que se ve, pero dice más lo que no se ve” y ese es el análisis. Algunos municipios no contaron con la misma fuerza de las y los personajes políticos de renombre, (usted sabe a quiénes me refiero) Como estrellita de buena conducta fue el Partido del Trabajo y el Partido Verde Ecologista, quienes sí acudieron a dichos eventos.
¿Qué mensaje vemos? Una alianza mandatada por MORENA, que al parecer solo hay felicidad, pero una esperanza en los partidos coaligados como el PT y el PVEM, quienes, al parecer, sí buscan trabajar para tomar tajada política e incrementar sus números en la siguiente elección, la cual es de suma importancia, pues designaremos a nuestra o nuestro siguiente mandatario gubernamental.
Ahora vamos a la derecha: En sus dos tomas de protesta, vemos una fuerza política increíble, como nunca se hubiese esperado. Quién diría hace 10 años, los que no se podían ni ver, ahora son más que mejores amigos. Tomaron protesta al viejo estilo del conservadurismo, uno asistiendo a misa recibiendo la bendición del sacerdote y otra realizando una fiesta “popular” dándose baños de pueblo. Una situación a resaltar fue la presencia de la ex candidata a la presidencia de la República, la Ing. Xóchitl Gálvez Ruiz. Eso, amigas y amigos, es hacer las cosas muy bien.
Pero como lo escribo antes: eso es lo que vimos. ¿Qué es lo que no se vio? Una verdadera comunicación. Los dos ayuntamientos importantes, que son los que más deberían ser entrelazados es el de Villa de Álvarez y Colima. Los temas de inseguridad y economía dependerán del presidente municipal de Colima, Riult Rivera y la de Villa de Álvarez, nuevamente Tey Gutiérrez. Si bien, son de una alianza derechista, se nota en algunas fotografías la ausencia de comunicación, o mínimo de interés en generar sonrisas entre ellos. Si su interés era emitir mensajes de cercanía con la gente, damos un tache a su equipo de comunicación. Lo importante es denostar el interés de trabajar por el bien de sus ayuntamientos ligados. Las sonrisas y besos eran en campaña.
¿Qué nos espera que sí podemos ver? La derecha lo único que le queda es hacer las cosas bien y luchar por su registro para la contienda electoral. Porque basado en sus números, no van muy bien. Y un consejo que siempre he otorgado a aquellos estrategas de los partidos PRI y PAN, y que hoy nuevamente sigo firme en ello es: lo mejor que pueden hacer es mantenerse comunicados. Que nadie haga lo que quiere. Que sigan una misma línea. No comentan el error de Coahuila evidenciando sus actos de corrupción entre ellos; o la falta de comunicación entre el mensaje de que no iban a eliminar los programas sociales, mientras salía el flamante ex presidente Vicente Fox a decir que sí se quitarán y lanzando un mensaje imponente: ¡A trabajar, huevones!
Y desde la izquierda, vimos felicidad y muchos mensajes de esperanza, así como algo muy notorio que sí hizo falta en el otro lado: comunicación entre todos. El mensaje de positivismo, esperanza y agradecimiento por el triunfo electoral fue notorio en cada toma de protesta, aunque algunos ya diremos en unos meses que es un escrito rimbombante o “choteado” ¿Qué más podemos ver? La relación comunicativa entre la presidenta electa, la gobernadora, las y los diputados locales, así como los cabildos izquierdistas.
Para mantener una balanza entre esta columna, también le mandaría un consejo a la alianza Sigamos Haciendo Historia: Dejen trabajar a todas y todos. Se cuenta con mucha fuerza en el estado y en la República, pero el individualismo nunca lleva a nada positivo, y menos en un movimiento que enarbola un proyecto nacionalista con la máxima del humanismo nacional. Escúchense entre ustedes. Realicen la práctica que, hasta ahora, solo un partido en México ha realizado: el Partido del Trabajo. Esta acción se conoce como “centralismo democrático” Que la soberbia, poder, y mucho menos la ambición los conmueva, porque será el fin de este sexenio esperanzado. ¿A qué prueba me remito? A la historia de la derecha, que desde sus inicios esas fueron sus debilidades, y hoy no saben cómo regresar a sus verdaderos principios políticos.
Y ahora un consejo para usted, lector o lectora: seamos críticos y críticas de todo. Seamos neutrales ante la toma de decisiones, y mejor aún, hay que informarse ante todos los cambios que se proponen. La mayoría calificada es una esperanza, pero no sabremos si es lo mejor.
Solo nos queda a nosotros y nosotras hacer presión política. Hace unas semanas tuve una discusión con una compañera que se encontraba en desacuerdo por la reforma judicial, (que, si desea usted saber mi postura y análisis, le invito a leer mi columna de hace un mes) Ante la discusión, ella aseveró que no tenía interés en leer dicha reforma, pues era una bazofia política; que era obvio la manipulación de MORENA, etc. Ese es el problema: no nos informamos; nos informan. Seamos realistas y, sobre todo, otro consejo que doy es una frase que nuestro ex presidente dijo muy atinadamente: “solamente el pueblo puede salvar al pueblo”