Colima.- De acuerdo con la Unión Ganadera Regional de Colima, la actividad volcánica del pasado fin de semana sólo dejó como consecuencia cuatro cabezas de ganado muertas al entrar en contacto con los flujos piroclásticos en el Ejido Quesería, municipio de Cuauhtémoc; en tanto que ningún animal sufrió daños por ingerir pasto cubierto de la ceniza expulsada por el coloso.
Jorge Salazar Barragán, presidente de la Unión Ganadera Regional, destacó que pese a las versiones según las cuales decenas de animales murieron por entrar en contacto con los materiales arrojados por el volcán, las autoridades y la propia organización de productores sólo encontraron evidencia de cuatro, en la barranca de Montegrande.
La preocupación por la ingesta de ceniza volcánica se disipó para los ganaderos por la fuerte lluvia del fin de semana pasado, la cual limpió de este material los pastos que alimentan el ganado, explicó.
Salazar Barragán, el pasto de esa región del estado tiene una hoja muy delgada que no favorece la acumulación de ceniza; incluso, agregó, para que el ganado sufra problemas en la piel y los huesos debe haber consumido “demasiada” ceniza, durante dos o tres meses.
Lluvias
En otro tema, Salazar Barragán dijo que confía en que las lluvias de los últimos días favorezcan el crecimiento de pasto para alimentar el ganado, pues en la reciente temporada, la escasez de precipitaciones preocupaba a los productores.
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