El gasto de México por cada alumno en el sistema educativo “permanece muy bajo” en comparación con el resto de los 31 países de la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OCDE), a pesar de que aumentó el porcentaje de sus ingresos totales destinados a educación.
De acuerdo con el reporte Panorama de la Educación 2010 de la OCDE, publicado este martes, México invierte 5.7% de sus ingresos totales en educación, más que Brasil, con 5.2%, pero menos que Chile, con 6.4%.
Más del 90% de la inversión educativa mexicana se dedica a pagar sueldos, lo que deja “poco margen de maniobra para otros recursos educativos” y mantiene “muy bajo” el gasto por alumno.
En este contexto, la organización civil México Evalúa publicó el lunes un análisis en el que señala que 97.6% del gasto social -que incluye el gasto educativo- en México se diluye en el pago de salarios.
Según la OCDE, el gasto de México por cada estudiante en educación primaria es de 2,111 dólares (27,231.9 pesos), cuando el promedio de la OCDE es de 6,741 dólares (86,958.9 pesos).
Por cada alumno en secundaria gasta 2,236 dólares (28,844.4 pesos), mientras el promedio de la OCDE es de 8,267 dólares (106,644.3 pesos).
Los estudiantes mexicanos de educación superior son los que obtienen más recursos, 6,971 dólares por alumno (89,925.9 pesos), contra el promedio de la OCDE de 12,907 dólares (166,500.3 pesos).
La OCDE considera que, de acuerdo con la evaluación PISA 2006, “la calidad de los resultados de aprendizaje en México aún no es representativa del gasto por alumno. Los resultados del PISA 2009 en diciembre darán a conocer si la situación ha mejorado y en qué medida”, señaló en un comunicado.
Otro aspecto analizado por la organización es la poca participación de los padres en las escuelas, en comparación con otros países de la OCDE.
“México es el único país donde una característica permanente de las escuelas públicas es no tener un organismo rector en el que los padres pueden participar (aunque en algunos países, dichos organismos sólo existen de forma esporádica)”, menciona.
Según la OCDE, “invertir en la educación hoy es más importante que nunca, ya que permitirá responder a los cambios demográfico y tecnológico que están teniendo efecto en los mercados laborales”.
Educación y empleo
Entre 2008 y 2009, la crisis económica mundial generó un aumento del desempleo de 5% entre los jóvenes de países de la organización con bajo nivel educativo, es decir, sin estudios de preparatoria.
En contraste, para aquellos jóvenes con educación superior, la tasa de desempleo sólo aumentó en 2 por ciento.
“Sin embargo, en el mercado laboral mexicano, las ventajas de la educación aún no son claras”, indica la OCDE.
De acuerdo con la organización, los indicadores no explican la relación entre los problemas del mercado de trabajo y las deficiencias educativas entre las personas que buscan empleo.
“También cabe notar que el 42% de los estudiantes mexicanos de educación superior nunca se titulan”, señala la OCDE.