México.- La obesidad infantil representa un grave problema de salud en México, pues se estima que 34.4 por ciento de la población en edad escolar padece obesidad o sobrepeso.
Sin embargo, esta situación se puede prevenir si, desde temprana edad, los padres implementan hábitos alimenticios adecuados.
Para lograrlo, la Secretaría de Salud Federal recomienda cinco sencillos pasos:
• Incluir en la dieta de los niños cinco porciones de frutas y verduras al día. Estos alimentos son ricos en vitaminas, minerales, agua y fibra. Esta última va a ayudar a que el niño se sienta más satisfecho, previniendo que consuma otros productos.
• Evitar las bebidas endulzadas con azúcar, como son las limonadas, los refrescos o los jugos. Es preferible ofrecer agua y bebidas bajas en energía para acompañar los alimentos.
• Limitar el tiempo que los niños pasan frente a una pantalla, ya sea televisión o computadora.
• Realizar una hora de ejercicio diario con los pequeños. Puede ser algo sencillo, como jugar a la pelota o con la cuerda, llevarlos al parque a caminar o inscribirlos en algún deporte si está dentro de las posibilidades.
• Si comen fuera de casa, evitar el consumo de comidas con alto contenido calórico como empanizados y fritos.
• Finalmente, señala que comer en familia, mínimo una vez por día, permite fomentar hábitos de alimentación saludables. BP