Ciudad de México.- El Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS) presentó su plan institucional para dar continuidad a los servicios médicos, el cual se basa en tres ejes: seguridad de instalaciones, recuperación de áreas de trabajo y reorganización en la operación de los servicios que fueron suspendidos por la pandemia de COVID-19.
El director general del Instituto, Zoé Robledo, informó que para crear el plan se utilizó la “Guía de continuidad para garantizar los servicios en las unidades médicas de la Administración Pública Federal en la Nueva Normalidad”.
En conferencia de prensa y acompañado por directivos del área médica, señaló que para atender la emergencia sanitaria el Instituto llevó a cabo una reconversión histórica que involucró recursos humanos, financieros, técnicos, físicos y de infraestructura.
Zoé Robledo indicó que conforme disminuya el número de contagios confirmados y la demanda por una cama de hospitalización, se regresará a la normalidad en los hospitales.
El director de Prestaciones Médicas, Víctor Hugo Borja, comentó que la reconversión del Seguro Social significó destinar 16 mil 074 camas para pacientes COVID en la etapa donde más se necesitó, además de 4 mil 645 ventiladores y la integración de 2 mil 535 equipos de respuesta, que se traducen en 40 mil 491 médicos y enfermeras a cargo de estos pacientes.
El doctor Borja detalló que desde el inicio de la epidemia, se dotó de Equipos de Protección Personal (EPP) a las y los trabajadores del IMSS, a quienes se han entregado más de 30 millones de respiradores N95, KN95 o N99, más de 35 millones de cubrebocas triple capa, 1.8 millones de caretas, casi dos millones 600 mil goggles, más de 27 millones de guantes, 24 millones de batas y tres millones de overoles.
Aseguró que con las acciones realizadas por el Seguro Social “no nos ha ganado el COVID para la atención del resto de la población y por eso queremos urgentemente regresar a atender estos otros padecimientos crónicos, cardiovasculares y metabólicos”.
Aclaró que los pacientes de cáncer siguieron su tratamiento, y el 80 a 85 por ciento de las consultas de los derechohabientes del IMSS que se dan en el primer nivel de medicina familiar, se mantuvieron.
Por su parte, el coordinador de Atención Integral en Segundo Nivel, doctor Raúl Peña Viveros explicó que 13 Oficinas de Representación del IMSS en los estados tienen unidades médicas que ya están operando servicios programados que fueron diferidos, en total son 446 Unidades de Medicina Familiar, 38 hospitales y una Unidad Médica de Alta Especialidad.
Esto en Campeche, Chiapas, Chihuahua, Guerrero, Morelos, Oaxaca, Quintana Roo, Sonora, Tabasco, Tamaulipas, Tlaxcala, Veracruz Norte y Veracruz Sur.
Indicó que a partir del primero de septiembre, se ha empezado a recuperar los servicios que fueron diferidos al brindar más de 20 mil consultas de especialidades, más de 2 mil cirugías que regularmente no se estaban realizando en el momento de atención máxima COVID; más de 120 mil estudios de diagnóstico.
En cuanto a reorganización operativa, Peña Viveros indicó que es sumamente importante utilizar toda la capacidad institucional para poder recuperar lo más rápido posible los servicios.
Comentó que en hospitales de segundo y tercer nivel se contará con servicios COVID y no COVID, urgencias respiratorias, consulta en horarios no habituales, jornadas especiales quirúrgicas, estudios de laboratorio y radiodiagnóstico en fines de semana. BP