Colima.- Tras 20 años de investigación coordinada entre la sede local del Instituto Nacional de Investigaciones Forestales, Agrícolas y Pecuarias (Inifap) y la Fundación Produce Colima, se han logrado opciones para que los productores de Tamarindo migren a la producción orgánica.
En entrevista con AFmedios, Mario Orozco Santos, investigador del Inifap con sede en Tecomán, detalla que una de las opciones más destacadas es la generación de un repelente de plagas a base de extracto de ajo que sustituye a los agroquímicos, y que ya se encuentra en las plantaciones de exhibición.
“La mayoría de los insumos los producimos nosotros como aspectos de nutrición, control de plagas, de manera artesanal producimos extracto de ajo que es un repelente muy bueno para muchas plagas, utilizamos las lombrices para producir el fertilizante, todos los desechos orgánicos que generalmente uno los tira a la basura, nosotros los aprovechamos para producir el fertilizante junto con la lombriz y el estiércol de ganado bovino”.
Además, se han generado información sobre control de enfermedades, sin embargo, los productores aún no migran a la generación orgánica porque no vislumbran un buen mercado.
“Lo que tenemos son parcelas demostrativas y con eso mostramos al productor que sí es posible producir de manera orgánica pero también el productor puede usar muchas de las prácticas para hacer un manejo más sustentable, en lugar de aplicar un producto químico, que mejor lo haga con uno orgánico”.
“En otros lugares el fruto orgánico se paga mucho mejor, y en México no tenemos esa cultura todavía, falta que el consumidor valore que adquirirrá un fruto sin ningún residuo químico”.
Cada año, en el estado de Colima se producen 15 mil toneladas de tamarindo en un territorio de 2 mil 500 hectáreas.
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