El programa de Infraestructura Básica para la Atención de los Pueblos Indígenas (Pibai) de la Comisión Nacional para el Desarrollo de los Pueblos Indígenas (CDI) invirtió este año 210 millones 46 mil 973 pesos en la entidad.
La delegada de la CDI, Diana Canto Moreno, reportó que con esos recursos se atendió a 70 municipios y 120 localidades con más de 200 acciones, beneficiando a 174 mil 503 maya-hablantes.
En entrevista, la funcionaria señaló que ese programa tiene la misión de apoyar en la dotación de servicios básicos que contribuyan a que los habitantes de las localidades indígenas superen su aislamiento y dispongan de bienes y servicios básicos.
Se otorgaron apoyos para construcción o modernización de carreteras y caminos rurales, líneas y redes de distribución de energía eléctrica y electrificación, así como construcción y ampliación de sistemas de agua potable, alcantarillado sanitario y saneamiento.
En el tercer trimestre de este año se concretó una ampliación de recursos propios, con la inyección de 15 millones 462 mil 889 pesos a la inversión que originalmente se programó para este ejercicio en 194 millones 584 mil 84 pesos.
Canto Moreno mencionó que la ampliación de fondos dio como resultado una inversión superior a 210 millones de pesos, de los cuales 131 millones fueron recursos federales, en beneficio de las comunidades más vulnerables.
La inversión que resultó de la ampliación permitió realizar, por ejemplo, obras de electrificación en municipios como Kantunil, San Dionisio en Peto y Becanchén en Tekax.
Entre las obras que recientemente se concluyeron como parte del Pibai están la ampliación del sistema de agua potable en Tahdzibichén, Yaxcabá, con una inversión bipartita de dos millones 59 mil pesos, siendo la aportación federal de un millón 235 mil 401 pesos y la estatal 823 mil 600 pesos.
La obra, benéfica para mil 567 pobladores, incluye una subestación eléctrica y equipos electromecánicos.
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