Quesería.- Al grito de «¡queremos justicia!» y «¡queremos un pueblo seguro!», cientos de habitantes de la comunidad de Quesería, municipio de Cuauhtémoc, marcharon la tarde del miércoles 23 de julio desde la escuela primaria 20 de noviembre hasta la casa donde se realizará el novenario de rosarios a la memoria de Alitzel, la joven originaria de esta comunidad que fue asesinada el lunes.
Niños, jóvenes y adultos, indignados por el asesinato de Alitzel, tomaron las calles para exigir justicia, un alto a la delincuencia e incluso la emisión de una alerta de género que permita poner un alto a los ataques a mujeres que se han registrado en la entidad.
Cargaron globos blancos, como un llamado silencioso a la paz y a la armonía, además de cartelones con mensajes de rabia hecha palabras: “No más feminicidios”, “Justicia para Ali”, “Quiero un futuro libre de violencia” y “Ya basta de tanta delincuencia”.
En el contingente participó la alcaldesa de Cuauhtémoc, Indira Vizcaíno Silva, y el diputado local por ese municipio, Rafael Mendoza Godínez, quienes se han mostrado consternados por el crimen.
Una mujer al frente de la marcha gritaba las consignas que las gargantas de los asistentes no se cansaron de corear en todo el recorrido.
En cada frase, un reclamo a las autoridades: “Que los policías cuiden a la gente, no a las autoridades”; una alerta para los padres: “Padres, ¿saben dónde están sus hijos?”; un recuerdo para Ali, como la nombraban cariñosamente: “Te extrañaremos, Ali, tu muerte no será en vano”.
Los gritos de “¡justicia, justicia!” guiaron las almas indignadas hasta la casa de la familia de Alitzel, donde su tío Rogelio agradeció la solidaridad de la comunidad de Quesería y pidió frenar la impunidad, esclareciendo el asesinato de la joven estudiante.
“Que ya no haya impunidad, que las autoridades hagan su chamba, que se preocupen por la gente, porque un pueblo unido jamás será vencido”, dijo.
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