Si miramos a simple vista el perfil de la embarazadísima diseñadora Victoria Beckham, podemos apreciar que el pequeño canadiense se ha infiltrado en su familia.
Pero que no cunda el pánico, la foto tiene truco. En la imagen podemos ver a su marido el futbolista reclinado en una hamaca bien cerquita de Justin Bieber.
Pero, si nos fijamos más a fondo, nos damos cuenta de que solo uno de los dos es real. Y es que David quiso bromear comprando una réplica a tamaño real de la estrella del pop… pero de cartón. Seguramente, regalo para alguno de sus tres hijos, seguidores confesos del canadiense.
Todas las papeletas las tiene Romeo, fan incondicional hasta el punto de querer que su próxima hermanita se llame Justine Bieber Beckham.
Pero la afición de los Beckham por la música del intérprete de Baby no nos pilla de nuevas. Ya el año pasado, Justin les ofreció dar un concierto privado para la familia si el patriarca se comprometía después a darle unas clases particulares de fútbol, como moneda de cambio. Todo quedó en el aire.