La idea de una cámara entrando por un orificio de tu cuerpo para efectuar un diagnóstico aterra disgusta a cualquiera, pero por fortuna, la ciencia ha avanzado de forma que conozcamos ya una mini cámara que ostenta el título de ser la más pequeña del mundo.
Sus medidas lo dicen todo: 99 0,99 milímetros de diámetro y cuenta con un sensor CMOS de 66 x 66 mm que registra vídeo a 45.000 píxeles de resolución. Lo mejor del asunto, es que la cámara es desechable, aunque también hay una versión reutilizable.