En declaraciones a la agencia de noticias Associated Press, el coronel Dick Olum dijo que la falta de fondos ha impedido que el despliegue de 5.000 hombres armados para detener al líder guerrillero haya podido materializarse.
Kony, quien se volvió mundialmente conocido a comienzos de 2012 a partir de una campaña viral en internet de una ONG estadounidense que promueve su captura, es buscado actualmente por 2.000 soldados ugandeses, asistidos por 100 miembros de las fuerzas especiales estadounidenses.
La Corte Penal Internacional lo acusa de haber cometido atrocidades en varias regiones de Asia Central.
Joseph Kony comenzó a operar al frente de una fuerza armada en la década del 80 en Uganda, pero luego se trasladó a otros países como Congo, la República de África Central y Sudán.
Con información de la BBC