La madrileña Puerta del Sol es el escenario en los últimos años de protestas multitudinarias como la acampada del movimiento 15M de «los indignados». Ataviados con sus cascos y linternas de trabajo, alcanzaron poco antes de las dos de la madrugada el emblemático «kilómetro cero», punto del que parten las carreteras radiales españolas, tras 19 días de caminata.
El reflejo de sus faroles pudo verse a su paso por las principales calles céntricas de la capital, como Princesa, Plaza de España y Gran Vía, mientras se escuchaba el himno de los mineros «Santa Bárbara bendita», a través de la megafonía de la cabecera de la manifestación.
Muchos ciudadanos animaron a los caminantes gritando a su paso «Madrid entero está con los mineros» y «si esto no se apaña: caña, caña, caña», a lo que ellos respondieron «este pueblo sí nos quiere».
Los mineros de la marcha que días atrás habían salido de la provincia aragonesa de Teruel se encontraron por la mañana con los que partieron del norte de España (Asturias y Castilla León principalmente) en Aravaca.
Antes de llegar a la Puerta del Sol, los manifestantes de la «marcha negra» pasaron delante del Palacio de la Moncloa, sede del Gobierno y residencia del jefe del ejecutivo, Mariano Rajoy, momento en el que lanzaron pitidos y corearon lemas como «vivan los mineros» y «mineros unidos, jamás serán vencidos».
Según confirmó la Delegación del Gobierno de Madrid, todo el camino hasta la Puerta del Sol discurrió sin los incidentes que se temían. Está previsto que mañana los mineros se manifiesten frente al Ministerio de Industria, Energía y Turismo, con lo que habrán culminado su viaje hasta la capital de España para protestar contra los recortes que han recibido las ayudas al carbón en los presupuestos generales del Estado, que superan el 60 %, según los cálculos de los sindicatos.
Sobre este ajuste, los responsables de los sindicatos mayoritarios Ignacio Fernández Toxo (CCOO) y Cándido Méndez (UGT) señalaron durante esta jornada que «no hay alternativa a la industria del carbón» en las cuencas mineras españolas.
Mientras, el secretario general del Partido Socialista Obrero Español (PSOE), el principal de la oposición, Alfredo Pérez Rubalcaba, pidió a través de Twiter a Mariano Rajoy que negocie con los mineros. Los mineros leyeron un manifiesto en la Puerta del Sol en el que proclamaban que continuarán «la lucha». «A todos juntos no nos van a poder parar», dijeron.
Además, pidieron al Gobierno que retire los recortes y que, de esa forma, cumpla con lo que se había pactado en el Plan del Carbón, que concluye este año. A los mineros se les sumarán vecinos de sus comunidades autónomas, entre quienes estarán los alcaldes y concejales de las cuencas mineras asturianas, que han abandonado hoy los encierros simbólicos que mantenían desde el pasado domingo en varios ayuntamientos.
El objetivo que persiguen los más de dos centenares de trabajadores que se desplazaron a pie hasta Madrid es que el Gobierno retire los recortes en las ayudas al carbón. Responsables de Industria subrayaron que no se trata de «un capricho» del gobierno, sino que los recortes están determinados por una decisión europea, que obliga a elaborar un plan de cierre ordenado de las ayudas a la minería del carbón para 2018.
Según cifras disponibles, la industria de la extracción del carbón en España no es rentable, la producción ha ido descendiendo progresivamente y el país importó en 2011 unos 16 millones de toneladas de carbón.
Con información de EFE