Por primera vez en México y América Latina se lanzará un satélite ciudadano, con el apoyo de la Agencia Espacial Mexicana (AEM), lo que colocará al país a la vanguardia en esa materia en la región, informó el diputado perredista, Andrés Eloy Martínez Rojas.
En rueda de prensa, donde lo acompañó el director de Difusión de la AEM, Mario Arreola Santander, precisó que el objetivo es despertar vocaciones científicas entre la población y el interés de las autoridades y la academia para impulsar este tipo de iniciativas.
Martínez Rojas explicó que se denominó «satélite ciudadano» porque en diciembre próximo se lanzará una convocatoria para inscribir las iniciativas ciudadanas en investigación científica, que podría desarrollar este satélite, el cual será lanzado a finales de 2013.
Para ese fin, el diputado del Partido de la Revolución Democrática (PRD) destinará ocho mil dólares propios a la compañía estadounidense Interorbital Systems de Mojave, California, que se dedica a armar paquetes para el lanzamiento individual de satélites.
Destacó que la AEM dará todo el apoyo tecnológico para el lanzamiento del satélite, que mide 30 centímetros de diámetro, y para recibir los proyectos que envíe la ciudadanía, sobre todo esperan de jóvenes estudiantes, tanto de ciencias como de artes.
Así como para asesorar el lanzamiento de este satélite, que será desde la Isla de Tonga que se localiza en el Pacífico sur y que se conoce como El Reino de Tonga, al norte de Nueva Zelanda, lugar que rentan porque tiene el espacio para hacer este tipo de acciones.
Explicó que el nombre que se dará al satélite sería el de «Esperanza», pero con una traducción de un idioma nacional como náhuatl, maya o zapoteco, entre otros, y podrá desarrollar en el espacio exterior, al estar en órbita, experimentos de radiocomuniación, de material biológico y observación de la atmósfera, entre otros.
Martínez Rojas dijo que este pequeño satélite es para divulgar información científica, y cuando este en el espacio transmitirá los datos que obtenga a través de frecuencia de radio, ya que después de estar tres meses en órbita se desintegrará y con ello contribuirá a no dejar basura en el espacio, que es otro grave problema.
En este contexto, manifestó su interés por presidir la Comisión de Ciencia y Tecnología, pues dijo que aunque es considerada «el patito feo» de las comisiones legislativas, para él es como el «cisne», pues con el impulso a la ciencia y tecnología, no sólo se da el crecimiento económico sino se combatiría la violencia y se abatiría la pobreza.
A su vez, el directivo de la AEM felicitó la existencia de iniciativas de este tipo, que ahora ya se pueden hacer a nivel personal, pues existen empresas como Interorbital Systems que ofrecen «kit» como el de este satélite, que incluye todos los servicios a diversos precios.
Subrayó que uno de los objetivos es estimular la creatividad y que se obtenga experiencia en la AEM, que permita generar tecnología y desde México lanzar estos servicios hacia la región, primero de América Latina y luego para todo el mundo.