Manzanillo, Colima.- No es sorpresa que la línea interna de Morena como partido sea unánime: respaldar, defender y evitar críticas hacia el presidente y el partido. Sin embargo, parece que la alcaldesa de Manzanillo, Colima, Griselda Martínez Martínez, siguió la primera premisa, pero pagará las consecuencias por desviarse de la segunda.
Según versiones extraoficiales ventiladas por la propia alcaldesa en entrevistas con los periodistas de la Ciudad de México, Julio Astillero y Ricardo Ravelo, el partido, a través de su líder nacional, el colimense Mario Delgado, la habría expulsado de sus filas.
“Nos indicó el presidente de Morena, Mario Delgado que estamos fuera de la contienda (electoral) y fuera del partido. Nos indican que por esta entrevista estamos fuera”.
Esto sucedió después de que Martínez, en la entrevista con Ravelo, insinuara que un cartel tenía influencia sobre el gobierno de Colima, sugiriendo acuerdos con miembros de Morena en el Ejecutivo estatal.
Sin embargo, aquellos que siguen la política en Colima saben de la disputa y rivalidad persistente entre la alcaldesa y la gobernadora. Esta enemistad manifiesta solo puede tener un desenlace: la eliminación de uno de los dos actores. No hay espacio para ambos.
Este 18 de enero, trascendió la entrevista de Martínez con Julio Astillero, donde afirmó: «Yo sí le creí al compañero presidente cuando me pidió que no me doblara, que me iban a apoyar y que me mantuviera firme ante cualquier situación». Sin embargo, denunció que, a cambio de seguir la directriz del líder del partido, fue expulsada y se le retiró la candidatura.
Julio Astillero cuestionó sus declaraciones vertidas con Ricardo Ravelo, pero Martínez aseguró que nunca tuvo la intención de perjudicar al partido ni a la virtual candidata presidencial de Morena, Claudia Sheinbaum Pardo. Afirmó que siguió la línea de Andrés Manuel López Obrador y, como resultado, experimentó persecución y, ahora, la expulsión del partido.
Martínez, actualmente en su segundo periodo de reelección municipal, ya no puede aspirar a uno másy solo tenía dos opciones viables para su carrera política: el Congreso local o federal bajo las siglas del partido del Presidente. Además la alcaldesa, busca favorecer a su exsecretaria del Ayuntamiento, Martha Zepeda del Toro, para continuar en el gobierno municipal; ambas son enemigas políticas de la gobernadora.
Por otro lado, la gobernadora Indira Vizcaíno Silva parece tener claro que no quiere prolongar la presencia de Griselda y su grupo en el puerto, y tener influencia en las candidaturas locales del puerto.
Aunque existen varias interpretaciones sobre la expulsión de Griselda Martínez, es evidente que sus declaraciones recientes sobre la mandataria estatal y las dependencias estatales fueron el escenario propicio para que el líder del partido, el colimense, Mario Delgado, aplicara los estatutos y la excluyera no solo de las posibilidades de buscar un cargo bajo las siglas de Morena, sino también de los escenarios políticos inmediatos y por ende quedar huérfana políticamente.