De Espuma de Mar
Por: Mariana PÉREZ OCHOA
Las y los latinos en Estados Unidos representan casi el 20% de la población total, es decir, alrededor de 65 millones de personas, ¡eso equivale a 8 veces todos los habitantes que hay en la ciudad de Nueva York! Es importante saber que de este total, son más de 36 millones de latinos los que están habilitados para votar el próximo 5 de noviembre por quien dirigirá la Casa Blanca.
La población latina es formada por mexicanos, salvadoreños, cubanos, dominicanos, y otros países centroamericanos en su mayoría, han sido un importante impulso económico y de influencia cultural en Estados Unidos. Son más que solamente trabajadores o “mano de obra”, son profesionistas, son creadores de cambio, son empresarios, son científicos, son jueces, son artistas.
Si bien la importancia latina como la minoría étnica más grande del país del norte radica en el ámbito social, cultural y político, sin duda el impacto más evidente y tangible es a nivel económico. Recientemente, el Centro de Investigación y Previsión Económica de la Universidad Luterana de California publicó un informe en el que se expone que si las personas latinas que viven en Estados Unidos fueran un país, serían la quinta economía mundial. Su Producto Interno Bruto sería superior al de Reino Unido, Francia e India. Estamos hablando que solamente China, Japón y Alemania tendrían un PIB superior al de las y los latinos en Estados Unidos.
Estos datos confirman que las personas latinas no solo contribuyen de manera significativa al crecimiento económico, sino que también son esenciales para la estabilidad y competitividad global de Estados Unidos. Este poder económico pone en evidencia el potencial que los latinos representan como consumidores, inversores y emprendedores.
A pesar del gran avance y éxito en términos económicos, culturales y políticos, la comunidad latina sigue enfrentando retos importantes, como la desigualdad en el acceso a la educación y la atención médica, discriminación racial y barreras lingüísticas. Sin embargo, las oportunidades para superar estos obstáculos son grandes, especialmente con el aumento de jóvenes latinos nacidos en Estados Unidos, que se están convirtiendo en una nueva generación que moviliza y forma bases fundamentales para este país.
Con una población joven y en crecimiento, la comunidad latina tiene el potencial de seguir expandiendo su influencia en todos los niveles. Según proyecciones demográficas, los latinos seguirán siendo uno de los motores clave del crecimiento de la población y del desarrollo económico en las próximas décadas. Esto significa que su papel en el futuro de Estados Unidos será cada vez más central, en todos los ámbitos.
Que este estudio se publicara unas semanas antes de las elecciones presidenciales estadounidenses, en un contexto bastante tenso entre Kamala y Trump, en el que, como ha sido casi históricamente, el tema migratorio es clave. Dado su impacto económico, la comunidad latina tiene la capacidad de influir significativamente en las políticas públicas y económicas. Este reconocimiento podría motivar a la población latina a exigir una mayor representación y políticas que respondan a sus necesidades y aspiraciones. El poder económico también es poder político, y es su herramienta más fuerte.
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