Un equipo de zoólogos fotografió a un mamífero vietnamita conocido como ciervo ratón (Tragulus versicolor), de la familia de ciervos asiáticos Tragulidae, que no había sido visto desde finales del último siglo. En tres meses de observación, la especie pudo capturarlo más de 200 veces. El estudio sobre este redescubrimiento fue publicado en Nature Ecology & Evolution.
Un poco de historia
El ciervo vietnamita fue estudiado por primera vez a inicios del siglo XX: la primera mención de este animal en la literatura científica se remonta a 1910. La especie se caracteriza por un color grisáceo en la espalda y ausencia de franjas verticales en el cuello, una característica de parientes cercanos como los ciervos ratón pequeños, o T. kanchil.
Estudiar a esta especie ha sido siempre un reto debido a su pequeño tamaño y color. Adicionalmente, a finales del siglo pasado el ciervo ratón fue víctima de la cacería indiscriminada. En consecuencia, no fue visto en la naturaleza por casi 30 años, pero al mismo tiempo no se les otorgó oficialmente un status de extinto: en el registro de la Unión Internacional para la Conservación de la Naturaleza (IUCN por su sigla en inglés International Union for Conservation of Nature) la especie figuraba en el grupo de “información insuficiente”.
La última señal de la existencia de este ciervo vietnamita fueron unos restos estudiados en 1990 por el Instituto de Ecología del Sur de Ho Chi Minh, Vietnam, siendo esta la primera evidencia en muchos años de que el animal aun habitaba en la región.
Cómo lo hicieron
Los científicos ubicaron cámaras escondidas en regiones del sur de Vietnam, en lugares donde el ciervo ratón fue visto anteriormente (incluyendo, por ejemplo, áreas cercanas a la ciudad costera de Nha Trang). Las observaciones fueron conducidas desde abril a julio del 2018, tiempo durante el que los científicos pudieron obtener 1881 fotos del protagonista de esta historia, en un total de 209 eventos de en 15 de 29 trampas.
Las trampas fotográficas son de los modos más comunes de observar animales en su hábitat natural: no solo en casos donde es necesario cuidar ciertas especies, sino también para estudiar sus comportamientos.
Por qué es importante
Según recoge Phys.org, los científicos advirtieron en una publicación de blog que “el hecho de encontrar esta especie con relativa facilidad no significa que no esté amenazada”. “Los bosques en el sudeste asiático están bajo una tremenda presión por el crecimiento de las poblaciones y el desarrollo, por lo que necesitamos adelantarnos a la curva en materia de conservación”, agregaron los autores.
El pasado mayo el IPBES, un cuerpo de expertos en biodiversidad de las Naciones Unidas, emitió un informe histórico que advierte que hasta un millón de especies enfrentan el riesgo de extinción debido al impacto de la humanidad en el planeta.
Daniel Meza
Este artículo ha sido publicado originalmente en N+1, ciencia que suma.