Bolivia, 26 de junio de 2024 – En un día de alta tensión política y militar, el presidente Luis Arce logró sofocar un intento de golpe de estado encabezado por el hasta entonces jefe del Ejército, General Juan José Zúñiga.

En una rápida respuesta a la crisis, Arce destituyó a Zúñiga de su cargo y nombró en su lugar a José Wilson Sánchez Velásquez, quien se desempeñaba como comandante general.

En una ceremonia formal, Luis Arce deploró las acciones de «malos militares» que intentaron repetir la historia de golpes de estado en Bolivia.

«Deploramos las actitudes de malos militares que, lamentablemente, repiten la historia, tratando de hacer un golpe de estado cuando el pueblo boliviano siempre ha sido un pueblo democrático», afirmó el mandatario.

Arce reafirmó su compromiso con la democracia, asegurando que se mantiene firme junto a su gabinete, el pueblo y «los buenos militares, que saben respetar la Constitución».

Durante el acto, los asistentes coreaban consignas de apoyo al presidente y en defensa de la democracia, como «el pueblo unido jamás será vencido», «Lucho no estás solo» y «Evo y Arce sí, dictadura no».

Arce prometió: «Haremos respetar la democracia ganada con el voto en las urnas del pueblo boliviano» y añadió que «todos los bolivianos, juntos, vamos a derribar cualquier intento golpista».

El mandatario también salió al balcón del palacio de gobierno para saludar a la multitud que se había congregado en la Plaza Murillo. Mientras tanto, la Fiscalía General del Estado ratificaba su compromiso con la defensa de la democracia y ordenaba un proceso penal contra el ex jefe del Ejército y aquellos que lo asistieron en sus acciones.

La ministra de la Presidencia, María Nela Prada, grabó un mensaje desde el palacio de gobierno durante la movilización, denunciando el intento de golpe: «Quiero denunciar un intento de golpe de estado. La Plaza Murillo está tomada por una facción del Ejército que se ha movilizado. También están fuera de la Asamblea Legislativa y no permiten el ingreso».

El ex presidente Evo Morales también reaccionó rápidamente, denunciando el golpe en ciernes y convocando a los movimientos sociales a defender la democracia. «Se gesta el golpe de estado. En este momento se despliega personal de las Fuerzas Armadas y tanquetas en la Plaza Murillo. Convocaron a las 3:00 pm a reunión de emergencia en el Estado Mayor del Ejército en Miraflores con uniformes de combate. Convocamos a los movimientos sociales del campo y la ciudad a defender la democracia», expresó Morales.

La rápida intervención del presidente Arce y el respaldo de las instituciones y movimientos sociales fueron clave para sofocar este intento de golpe, asegurando la estabilidad y continuidad democrática en Bolivia.

Los reclamos internacionales no se hicieron esperar en Hispanoamérica y otros  continentes, Así como organizaciones internacionales como la OEA.