COLIMA.- La Secretaría de Salud del Gobierno del Estado de Colima señaló que es importante que madres y padres de familia, como primer contacto, estén atentas y atentos al desarrollo normal de sus hijas e hijos, y consulten con especialistas en la materia para que les brinden orientación y seguimiento ante las dudas que observen en sus descendientes, ya que puede tratarse del Trastorno del Espectro Autista (TEA).
Deben estar alertas a signos que en ocasiones no se detectan, como si después de tres meses de edad, las y los bebés no fijan la mirada, sino voltean hacia donde hay ruido o si alrededor de los seis meses no responden a juegos como sonreír con sus mamás y papás cuando se acercan o se alejan, así como señalar cuando les interesa o desean algo. En relación al lenguaje, hay que observar si a los 24 meses aún no piden agua, leche o dicen mamá o papá, ya que también es una señal de alerta.
Claudia Casillas Maldonado, psicóloga y asesora técnica pedagógica en Educación Especial, en el marco del Día Mundial del Autismo, dijo que conocer las características del TEA permite perfilar un diagnóstico temprano, para lo cual se requiere trabajo multidisciplinario de pediatras, psicólogos, paidopsiquiatras, neuropediatras, terapeuta de lenguaje y terapeuta ocupacional, entre otros
Es importante un diagnóstico temprano para intervenir de manera oportuna y otorgar apoyos necesarios; precisó que los síntomas del autismo aparecen de forma variable a partir de los 18 meses y se consolidan a los 36 meses de edad. Reconoció que, aunque en el autismo se carecen de predictores fiables, pero no inexistentes, a lo largo del primer año de vida, puntualizó que existen señales de alerta, aunque la intervención se inicia con la presencia en muchos casos de un diagnóstico inseguro o provisional.
Respecto al tratamiento del TEA, dijo que muchas veces se requieren programas específicos a cada persona para desarrollar habilidades sociales e interactuar con otros, lo que favorecerá al pronóstico en la adquisición y desarrollo de habilidades que contribuyen a una mejor calidad de vida en personas con esta condición.
Añadió que los entornos sociales son fundamentales en el desarrollo de personas con autismo, al igual que los apoyos tempranos, pertinentes y constantes. Manifestó que las personas con autismo quieren hacer las cosas correctas y responder a las expectativas que el mundo exterior les impone, por lo que como sociedad debemos cada día trabajar en la empatía y llevar la inclusión a la realidad, concluyó.