La UNAM no sólo se dedica a la educación e investigación de alto nivel y al fomento de la cultura, también es productora de huevo de alta calidad. Su Centro de Enseñanza, Investigación y Extensión en Producción Avícola (CEIEPAv) produce al año 61 toneladas de huevo rojo y 78 toneladas de blanco.
A propósito del Día Mundial del huevo, que se conmemora este 11 de octubre, Ezequiel Sánchez Ramírez, académico de esa instancia, refirió que los mexicanos comemos aproximadamente un huevo al día, lo que equivale a 22.3 kilos per cápita al año; somos el país consumidor número uno.
Perteneciente a la Facultad de Medicina Veterinaria y Zootecnia (FMVZ), el CEIEPAv, ubicado en la alcaldía de Tláhuac, es la “gallina de los huevos de oro” de la Universidad. Las aves de esta granja universitaria son alimentadas con ingredientes de alta calidad: sorgo, maíz, pasta de soya y proteína altamente digestible. En el Centro se cuenta con la asesoría de Ernesto Ávila, uno de los mejores nutriólogos especializados de México y América Latina, y con vigilancia médica las 24 horas.
“Tenemos animales sanos, por arriba del estándar, y sus huevos son frescos, no se disocian algunas proteínas como la lisozima, y la clara no se hace líquida, sigue compacta”, destacó.
Además, en el CEIEPAv se investiga, se forma a médicos veterinarios zootecnistas y a especialistas calificados con un enfoque práctico (desde 1971); se ponen en marcha modelos técnicos, científicos y financieros para solucionar problemas relacionados con la avicultura y cunicultura nacionales.
Tiene una afluencia anual aproximada de tres mil estudiantes; ahí se imparten materias especializadas y los alumnos pueden ver cómo viven las gallinas, su estado de salud y comportamiento, así como todo lo relacionado con el huevo.
Huevos auriazules
Sánchez Ramírez explicó que la producción de esa granja data desde hace más de seis décadas, pero a cargo de la UNAM lleva 48 años. “Aquí se crían y producen dos variedades de gallinas ponedoras: las ligeras, de huevo blanco, y las semipesadas, que proporcionan huevo café, mejor conocido como rojo”.
“Estas aves tienen líneas genéticas de origen alemán, y otras de los Países Bajos, que se incuban en México. La crianza dura 20 semanas, y después de ese tiempo empiezan a producir durante 52 semanas, aproximadamente. Contamos con cuatro mil gallinas para huevo blanco y tres mil para rojo. Nuestra producción puede considerarse alta, pero a la vez modesta respecto a empresas avícolas”, dijo.
Cada gallina produce, en promedio, alrededor de 330 huevos al año, y la cifra comienza a bajar a las 72 semanas de vida.
En promedio cada gallina produce una caja de huevo al año en 52 semanas de producción; es decir, un ave de estas líneas genéticas pone un huevo cada 26 horas.
Finalmente, el universitario detalló que el huevo es un producto perecedero y no debe almacenarse por largo tiempo porque “tiene un sistema de poros que en ocasiones puede hacer que se evapore y se pierda un gramo de su contenido por día”.
El huevo del CEIEPAv, puede adquirirse en la tienda “Puma Gourmet”, que este año cumplió una década de labores, ubicada en el Circuito Exterior s/n de Ciudad Universitaria.