México en el hoyo

Por: Héctor Romero Fierro

Terribles las noticias económicas del curso de la semana nos lleva a concluir que será más difícil para nuestro país recuperarse después de que termine la crisis del virus.

El mundo completo está entrando en una etapa de recesión, pero el presidente Manuel Andrés López Obrador MALO, desarticuló en poco más de un año la economía del país, lo que hace que enfrentemos la pandemia sin recursos financieros, y para colmo de males, el día de ayer la calificadora “Standar and Poor´s Global” bajo la calificación crediticia de nuestro país de “BBB+” a solo “BBB” con perspectiva negativa, segundo grado más bajo de inversión, dos escalones más abajo están las notas consideradas especulativas pudiendo convertir la deuda soberana del país como “bonos basura”, lo que implica que el costo financiero de la deuda mexicana se incremente en automático por lo que nuestro país deberá pagar más por los intereses de su deuda externa (y eterna), situación que prende también los focos ante la inversión extranjera, por lo que es probable que baje el flujo de esta y que inclusive se retire aún más rápido de lo que ya viene ocurriendo, agregando que la prolongada debilidad de su desempeño fiscal y el consecuente aumento en la deuda o el riesgo de una implementación débil de políticas, podría tener como consecuencia una nueva rebaja en la calificación.

JP Morgan estimó una contracción del 7 por ciento de la economía mexicana en este año, situándose el dólar debajo de los $24 pesos por dólar americano. Por la tarde se anunció que el precio de la mezcla mexicana de petróleo, cayó 12.89 por ciento para situarse en $14.67 dólares por barril.

Sin embargo, viene lo peor, si se suman otras calificadoras a la baja, la simple percepción de riesgo podría ser catastrófica para el país, disparando aún más el tipo de cambio y generando más perdidas en la Bolsa Mexicana de Valores, esto provocaría al juntarse con la crisis sanitaria, una tormenta perfecta, ya que después de la pérdida de vidas por la terquedad de manejar irresponsablemente la pandemia, se presentará un gran desempleo, Concamin estima una baja de entre 650 mil y 900 mil plazas dependiendo de la caída del PIB.

Pemex no soporta este precio, cercano al costo de extracción, aunque el presidente mienta diciendo que el costo de extracción del barril es de $4.00 dólares, cuando el costo promedio de extracción es de $14.20 dólares más costo laboral, e impuestos y dividendos, lo que da, según revistas especializadas en la materia un costo real de $25 dólares, por ello la crisis que se espera será más grave, ya que con precios altos PEMEX perdió en 2019 más de 18 mil millones de dólares sin incluir en esa cifra pasivos laborales.

Pero el presidente no cambia de idea, y quiere a toda costa continuar su proyecto de Dos Bocas ni detiene el inicio de las nuevas exploraciones, aunque estas no sean rentables. El resultado del primer trimestre de este año será terrible y eso hará que la deuda de Pemex sea calificada a la baja arrastrando en su caída la deuda soberana del país.

México no puede salir adelante sin la confianza de la iniciativa privada, esperemos rectifique el presidente, nosotros apoyemos a las Pymes como podamos.