Un crucero en el que viaja una trabajadora de la salud que está siendo monitoreada para detectar indicios de ébola no recibió autorización para atracar en la ciudad mexicana de Cozumel, un día después de que Belice se negó a que la pasajera bajara del buque en su territorio.
La mujer, del área de Dallas, trabajó con una muestra de laboratorio de un hombre liberiano que murió de ébola semanas atrás en el Hospital Presbiteriano de Salud de Texas, dijeron el viernes funcionarios del gobierno de Barack Obama. Ella se colocó a sí misma en cuarentena a bordo del crucero en el Caribe y está siendo monitoreada para detectar síntomas de la enfermedad, agregaron.
La trabajadora no ha mostrado indicios del padecimiento y ha estado asintomática 19 días, dijo Jen Psaki, portavoz del Departamento de Estado.
La línea de cruceros dijo el viernes que, después de no recibir la autorización, la nave partió de aguas de Cozumel poco después del mediodía de esa jornada para volver a su puerto de origen, en Galveston, Texas, el domingo por la mañana, como estaba programado originalmente.
«Lamentamos enormemente que esta situación, que estaba completamente fuera de nuestro control, haya evitado que la nave hiciera su visita programada a Cozumel y la decepción resultante entre nuestros viajeros», indicó Carnival en un comunicado. Los pasajeros recibirán un crédito de 200 dólares en sus cuentas y un descuento del 50% para cruceros futuros.
El crucero, Carnival Magic, también hizo una parada en Belice, pero las autoridades de ese país no permitieron que la pasajera dejase el barco. En una declaración, el gobierno de Belice dijo que había rechazado un pedido de Estados Unidos de que se permitiese a la mujer regresar al país a través del aeropuerto de Ciudad Belice.
«Por un exceso de cautela, el gobierno de Belice decidió no facilitar el pedido estadounidense de asistencia para evacuar a la pasajera por el Aeropuerto Internacional Philip Godson», se afirma en el comunicado.
Psaki agregó que cuando la mujer dejó Estados Unidos en el crucero desde Galveston, Texas, el 12 de octubre, las autoridades de salud solamente le requerían que se monitoreara ella misma.
Carnival Cruise Lines dijo en una declaración que la trabajadora, una supervisora de laboratorio, seguía aislada «y no es considerada un riesgo para pasajeros ni tripulantes».
«Estamos en contacto estrecho con los CDC (siglas en inglés de los Centros para el Control y Prevención de Enfermedades) y en estos momentos se ha determinado que el curso apropiado de acción es simplemente mantener a la pasajera aislada a bordo», se indicó en la declaración.
Una portavoz de la compañía de cruceros, Jennifer De La Cruz, dijo que cuando el Carnival Magic atracó en Belice, a los pasajeros se les permitió desembarcar, con la excepción de la trabajadora de salud y su esposo.
