Colima.- Aunque es obvio que del bloque del PT CENDIS a la autopista Colima – Guadalajara el Gobernador estaba bien informado, casi concertado, se suma a otra ejecución más a plena luz del día en Soriana, otra vez cerca de un lugar de alta concentración de personas.
Fueron casi mil las personas que al salir o llegar a Colima se llevan una mala impresión del Gobernador, un caos y una ingobernabilidad. Pareciera que al pasar por nuestra entidad, esos automovilistas, se preguntaron y dónde está el Gobernador de este Estado, lo mismo que miles de colimenses nos preguntamos desde que entró al poder y la inseguridad se incrementó, así lo declaró el Presidente Estatal del PRD, Francisco Rodríguez, lo llamó “un miércoles negro”.
Apenas ayer sepultaban al abogado Diego Javán Alcaraz Ley y hoy una ejecución más. Qué dirá Mario Anguiano al respecto, que otra vez es producto de los resultados de su estrategia de seguridad, que son hechos necesarios por combatir a los delincuentes. Lo cierto que resulta confusa su declaración respecto a la muerte del abogado del despacho del hermano de su Secretario General de Gobierno. Primero no sabe si son pariente con el funcionario, algo tan fácil como preguntarle a su subordinado. Pero segundo, lo más lamentable es que relaciona la muerte de Alcaraz Ley con su estrategia de seguridad, o sea, ¿se fueron a vengar del Secretario General, quien ya no es el responsable de la seguridad sino el nuevo Secretario del ramo’. Y sino sabe el Gobernador que son parientes, entonces, por qué lo relaciona con este hecho. La verdad que dejó más confusa la situación y de paso se llevó entre los pies a la familia del abogado al dejar la sospecha de una posible relación delictuosa.
A esto se suma el bloqueo de la carretera, pues entonces, resultó un miércoles negro para Mario Anguiano, concluyó el dirigente estatal.