Chiapas.- Aproximadamente cuatro mil personas, pertenecientes a la Caravana de migrantes hondureños, intentó entrar a la fuerza por la frontera sur de México; sólo un grupo de mujeres con niños logró pasar.
El contingente pretendió ingresar por el puente del Río Suchiate que divide a México y Guatemala, pero fue detenido por granaderos de la Policía Federal.
En la trifulca, el grupo de avanzada conformado por mujeres y niños, fue presionado por los hombres que le continuaban.
Autoridades de la Policía Federal informaron que los granaderos fueron agredidos con zapatos, palos y piedras por los migrantes en su intento por cruzar la frontera.
Después de la avalancha, se logró mantener el orden y se pidió a los migrantes hacer espacio para que pasaran por grupos, primero mujeres y niños.
Del lado mexicano, la Comisión Nacional de Derechos Humanos recibió al pequeño contingente que logró cruzar, para tomar sus datos y comenzar su proceso legal para establecer su estatus migratorio.
El gobierno de Chiapas informó que abrió nueve albergues para dar refugio a los casi cuatro mil migrantes de la Caravana.
La Policía Federal detalló que son cerca de mil elementos, junto con autoridades migratorias, las que trabajan para desahogar el flujo de migrantes en la zona.
El Gobierno Federal insiste en que habrá paso libre para los hondureños, pero éstos deberán apegarse a la legislación establecida, es decir, que se apeguen a cualquiera de los estatus migratorios con visa o en calidad de refugiados.
*Fotografía: CNN
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