Un estudio de España demuestra que los adultos que miran TV durante tres o más horas por día tienen el doble de riesgo de morir antes de los que pasan menos tiempo frente a la TV o que dedican el mismo tiempo a conducir un automóvil o utilizar una computadora.
Los autores estudiaron a una población de 37 años, en promedio, para eliminar el efecto de la edad avanzada. «Hicimos este estudio porque existían informes previos de un aumento de la mortalidad en las personas que pasaban más tiempo frente a la TV, pero habían incluido a adultos mayores de otros países», dijo por e-mail el autor principal, doctor Miguel Martínez-González, del Departamento de Salud Pública de la Universidad de Navarra, Pamplona. «Nos interesaba conocer si esta asociación también existía o no en adultos más jóvenes».
Los nuevos resultados coinciden con estudios previos que habían hallado que el riesgo de morir aumenta un 13 por ciento por cada dos horas diarias extras de exposición a la TV y que crece notablemente cuando el tiempo supera las tres horas.
El equipo analizó datos de 13.284 adultos que habían obtenido un título universitario en 1999 y en los ocho años de seguimiento se registraron 97 muertes: 19 por causas cardiovasculares, 46 por cáncer y 32 por otras causas.
Los que miraban TV dos horas por día tenían un 40 por ciento más riesgo de morir que los que dedicaban una hora o menos a la pantalla todos los días. El riesgo se duplicaba en los que miraban TV tres horas o más por día.
Conducir un automóvil dos horas por día aumentaba un 14 por ciento el riesgo de morir, a diferencia de hacerlo una hora diaria o menos. Usar la computadora dos horas todos los días estaba asociado con un 4 por ciento menos riesgo de morir que hacerlo una hora o menos. Dedicar tres o más horas a esas actividades no influía en el nivel de riesgo.
Estos resultados incluyen otros factores del estilo de vida, como la alimentación, la edad, el peso, el tabaquismo y la actividad física, según publica el equipo en Journal of the American Heart Association. El equipo aclara que el estudio no prueba que mirar TV causa la muerte precoz de manera directa, sino que sólo demuestra una correlación. Por eso, se necesitan más estudios para identificar los mecanismos que explican esa relación.
«El estudio señala la importancia de reducir el tiempo de sedentarismo y de hacer más actividad física moderada como lo recomiendan las guías de la Asociación Estadounidense del Corazón», dijo la doctora Heather Johnson, cardióloga de la Facultad de Medicina y Salud Pública de University of Wisconsin, y que no participó del estudio.