La lactancia materna es la forma ideal de aportar a los bebés los nutrientes que necesitan para un crecimiento y desarrollo saludables, aunque existen mitos por los cuales las madres deciden no amamantar a su pequeño hijo.
Mito: Las mujeres con pecho pequeño no pueden amamantar.
De acuerdo a la Secretaría de Salud del Estado es inexacto que las mujeres con pecho pequeño no pueden amamantar, toda vez que el tamaño de los pechos no influye en la lactancia.
Mito: Es malo comer ciertos alimentos durante la lactancia.
Es falso que las mujeres no puedan comer ciertos alimentos durante la lactancia y en el periodo de gestación, afirmando que no hay alimentos que aumentan o disminuyen la producción de leche y que a mayor succión corresponde una mayor producción de leche.
Mito: Si estás enojada o asustada no debes amamantar a tu bebé
Es incorrecto que la madre que está enojada o asustada no debe de amamantar, ya que el estrés o miedo extremo puede aletargar el flujo de la leche, pero se trata de una respuesta temporal del organismo ante la ansiedad.
Mito: El calostro debe ser desechado, es sucio y antihigiénico.
El calostro contiene muchos nutrientes y factores de defensa que fortalecen el sistema inmune del bebé e inclusive se considera como la primera vacuna.
Mito: Si estás embarazada debes dejar de amamantar.
La madre puede seguir amamantando, pues algunas hormonas que el cuerpo produce en el período de gestación pueden cambiar el sabor de la leche, pero no su calidad.