Colima.- El secretario de Educación del estado, Armando Figueroa Delgado, informó que en muchos casos, los jornaleros que llegan a asentarse a Colima no quieren que sus hijos reciban educación.
«No entienden cuál es la misión y la obligatoriedad que tienen de ofrecerles el derecho a la educación que tienen. Lo que menos quieren es que vayan a la escuela», dijo entrevista con AFmedios, el funcionario estatal.
Dio a conocer que una maestra y un maestro, son los encargados de atender a los 20 niños de origen mixteco, a quienes la Secretaría del Trabajo y Previsión Social detectó junto con sus padres, viviendo y trabajando en condiciones de explotación e inseguridad, en un campo de pepinos del municipio de Colima.
El funcionario estatal explicó que los niños del campo de pepino reciben atención de forma multidisciplinar, ya que cuentan con el apoyo del DIF Estatal, así como de las secretarías del Trabajo y Desarrollo Social, así como de la Procuraduría del Menor.
Por otra parte, Figueroa Delgado apuntó que la Secretaría de Educación tienen aulas móviles con las que brinda atención en su lengua materna a niños de jornaleros de otros estados, y que también les proporciona libros, cuadernos y uniformes, a través del programa denominado «Niños migrantes».
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