Colima.- La Secretaría de Salud y Bienestar Social informa que el COVID-19 afecta en mayor proporción a personas adultas, pero las niñas y los niños no están exentos de presentar esta enfermedad viral, aunque se presenta en forma distinta a la del adulto, lo que permite identificar oportunamente para evitar complicaciones.
De las diferencias más importantes en la forma de presentación de COVID-19 en infantes, sobre todo en aquellos menores de 10 años, los síntomas más frecuentes suelen ser los digestivos, principalmente el dolor abdominal, diarrea, náusea, vómitos y rechazo al alimento, aun cuando otro signo es la coloración rojiza de la piel conocida como eritema.
El servicio de Cardiología del Hospital Regional Universitario señala que como datos de gravedad se deben identificar la fiebre de difícil control, deshidratación severa, agrietamiento de los labios, coloración rojiza de la lengua, ojos rojos, aparición de petequias o puntos púrpuras en la piel, así como sangrado fácil y mal estado general, entre otros, sobre todo, si están relacionados al contacto con algún caso sospechoso o confirmado de COVID-19.
Los factores de riesgo en niños por COVID-19, son la edad menor de 1 año, enfermedades del corazón, padecer cáncer, estar recibiendo tratamiento inmunosupresor o quimioterapia, tener enfermedades respiratorias crónicas, desnutrición u obesidad.
En caso de tener la sospecha de que puedan presentar COVID-19, de debe avisar al médico sobre los síntomas que presentan, y si existe la necesidad de realizar pruebas complementarias, acudir a un hospital o mantenerse en casa, debiendo extremar las medidas de aislamiento domiciliario.
La única excepción para el uso de cubrebocas en niños, según la Academia Americana de Pediatría, es la edad menor de 2 años, esto para evitar obstrucción de la vía aérea.
La Secretaría de Salud reporta que al momento han sido diagnosticados por Covid-19 a 20 menores de un año de vida, 22 de uno a 4 años de edad, 35 de 5 a 9 años, 29 con edades de 10 a 14 años y 191 pacientes de 15 a 19 años de vida, los cuales pudieran desarrollar alguna secuela o complicación futura. BP