El presidente Barack Obama promulgó este viernes los Tratados de Libre Comercio con Colombia, Panamá y Corea del Sur, luego de cinco años de firmados, en un discreto evento en la Oficina Oval de la Casa Blanca.
Obama rubricó los acuerdos que supondrán un aumento de más de 12.000 millones de dólares de las exportaciones estadounidenses según datos oficiales, en un momento delicado para la economía de su país, con más de 9% de desempleo.
Para Colombia y Panamá esos acuerdos, ansiadamente esperados, significarán la entrada sin aranceles de los productos estadounidenses a sus respectivos mercados.
Prácticamente todas las exportaciones de ambos países latinoamericanos ya entran libres de aranceles a Estados Unidos gracias a viejas preferencias comerciales, que ahora serán progresivamente desmanteladas y sustituidas por las reglas comprendidas en los TLC.
Ecuador quedará ahora como único beneficiario de las Preferencias Arancelarias Andinas que hasta ahora también amparaban a Colombia. Esas preferencias también fueron renovadas con esta firma, así como un programa de asistencia a los trabajadores estadounidenses afectados por el libre comercio.
Inicialmente la Casa Blanca había anunciado unas declaraciones a la prensa de Obama en los jardines de la residencia con motivo de la firma, pero esa parte de la ceremonia fue cancelada.
El presidente estadounidense firmó los acuerdos en presencia de su Representante Comercial, Ron Kirk, de embajadores, jefes de compañías como Boeing, Xerox o Caterpillar y de miembros de su gabinete, así como de algunos congresistas republicanos.
Los tres TLC fueron votados con mayoría bipartidista en el Congreso hace diez días, un raro acontecimiento en Washington.
Pero ni el presidente de la Cámara de Representantes, el republicano John Boehner, ni el jefe de la mayoría demócrata en el Senado, Harry Reid, estuvieron presentes.
Obama mantiene un duro pulso con los republicanos sobre sus planes de creación de empleo, pero buena parte de los demócratas en la Cámara, así como Reid, votaron en contra del TLC con Colombia, el más controvertido de los tres acuerdos.
Firmado inicialmente por George W. Bush y Alvaro Uribe en 2006, el acuerdo estadounidense-colombiano tuvo que vencer muchas resistencias de parte de los demócratas, que exigieron y lograron que Bogotá emprendiera un plan de acción para proteger los derechos sindicales.
«El TLC es un peldaño fundamental en el desarrollo de un nuevo capítulo en las relaciones colombiano-estadounidenses y ayudará a expandir nuestras dos economías», reaccionó el embajador colombiano, Gabriel Silva, en un comunicado.
Además de petróleo, que supone la mayoría de las exportaciones colombianas a Estados Unidos, el país sudamericano exporta materias primas al gigante del norte.
Colombia necesita de su aliado y socio comercial trigo, maíz y maquinaria pesada principalmente.
El TLC con Colombia representará además un desafío para sus productores agropecuarios, que deberán hacer frente a la competencia de la carne o el arroz estadounidenses.
Estados Unidos exportó por valor de 11.000 millones de dólares a Colombia en 2010, e importó por valor de 15.700 millones de dólares.
Panamá, que importa gran parte de sus necesidades alimenticias, se beneficiará de la entrada gradual sin aranceles de productos como arroz, tomate, repollo, papas o caña de azucar, que al mismo tiempo son una competencia para sus productores.
Para Estados Unidos, sin embargo, lo más atractivo de Panamá es su ubicación geográfica y la ampliación del canal, por el cual pasan dos tercios de su comercio exterior.
Estados Unidos exportó en 2010 poco más de 6.000 millones de dólares a Panamá e importó por tan sólo 379 millones de dólares.
Las empresas norteamericanas, en especial las automotrices, tienen un gran interés en el TLC con Corea del Sur, un acuerdo que podría significar la creación de hasta 70.000 empleos directos en Estados Unidos.
Rodeado por miembros de su gabinete, el presidente de EEUU, Barack Obama, firma el 21 de octubre en la Casa Blanca la promulgación de los Tratados de Libre Comercio con Corea del sur, Colombia y Panamá
Con información de AFP