Al entregar el Premio Nacional de Derechos Humanos 2019 a Obtilia Eugenio Manuel, integrante de la Organización del Pueblo Indígena Me’Phaa, Asociación Civil para la defensa de las personas indígenas, el presidente Andrés Manuel López Obrador refrendó su compromiso de respetar los derechos humanos.
“Antes el principal violador de los derechos humanos era el Estado. Ahora no es así porque no se permite la violencia, la tortura, el aniquilamiento, las masacres, las desapariciones, la impunidad. Y si algún servidor público viola derechos humanos, es castigado. No se tolera la violación de los derechos humanos”.
Durante la conferencia de prensa matutina, el mandatario nacional indicó que el gobierno de la Cuarta Transformación está integrado por servidoras y servidores públicos “que le tienen amor a nuestro pueblo”.
“Nuestra manera de pensar y de ser aun ocupando este cargo, el más importante de la República, y siempre vamos a luchar por la justicia y vamos a cumplir todos nuestros compromisos”.
Destacó que la participación de las Fuerzas Armadas en las tareas de seguridad pública tiene como premisa actuar con respeto a los derechos humanos.
El jefe del Ejecutivo también otorgó la Mención Honorífica post mortem a Modesta Chávez de la Rosa, viuda de Margarito Díaz González; al mismo tiempo, se comprometió a reunirse con las comunidades de las galardonadas con el acompañamiento del subsecretario de Derechos Humanos, Población y Migración, Alejandro Encinas.
Obtilia, originaria del estado de Guerrero, del municipio de Ayutla, inició su intervención con un saludo en meꞌphaa, luego señaló que no pudo terminar el bachiller por falta de dinero y que no habla bien el español, idioma que aprendió a la fuerza.
«Desde niña sentí gran dolor en mi corazón, en mis brazos murieron mis dos hermanos pequeños, los mató el sarampión, no solo a ellos, 40 personas, hombre, mujeres y niños de mi pueblo, fue hace 30 años, nunca nos vacunaban, no teníamos caminos, ni escuelas, esos gobiernos nos olvidaron por ser indígenas».
La galardonada, asegura que su padre le insistió en que estudiara para defender a su pueblo.
Señaló que su pueblo fue acusado de ser Zapatista, hubo violencia y violaciones a mujeres, y nunca hubo justicia.
En 2002 se comenzaron a organizar y desde entonces han sido acosados y amenazados por gente del Ejército en complicidad por integrantes de la delincuencia organizada.
Obtilia dijo que a su hermano lo metieron a la cárcel y mataron a un hermano de una mujer violada, asesinaron a su prima, con la que fundó la organización y han encarcelado y acusado injustamente a miembros de la organización.
«La historia que conozco de mi pueblo ha sido de sufrimiento, también de lucha».
«Por los derechos humanos no puedo quedar callada, cuando conozco que a diario hay muchas mujeres que son acosadas, atacadas, asesinadas, no entiendo esta violencia contra nosotras, menos en los centros de estudios donde se supone que está la gente más civilizada».
Mencionó que en febrero de este año fue secuestrada, torturada por denunciar la corrupción y sigue viva por la movilización de colectivos y organizaciones de derechos humanos.
Pidió que la violencia se acabe en todos los espacios, no queremos más un violador en nuestro camino y también solicitó una reunión para plantear su programa de trabajo en conjunto con las autoridades.
Reitera respaldo a Piedra Ibarra
El presidente López Obrador reiteró su reconocimiento a Rosario Piedra Ibarra, titular de la Comisión Nacional de los Derechos Humanos. Dijo que tiene confianza en que hará justicia a las víctimas de violaciones y se asegurará de que no haya impunidad, simulaciones o influyentismo por parte de quienes cometan delitos.