Jalisco.- El operativo “Salvando Vidas” salió a carreteras de Jalisco el pasado fin de semana para realizar pruebas de alcoholimetría a conductores de vehículos que acostumbran a mezclar el alcohol con el volante.
El dispositivo encabezado por la Policía Vial se desplegó hasta la carretera libre Morelia-Guadalajara y se instaló al ingreso y salida del poblado de San Luis Soyatlán, en el municipio de Tuxcueca, en la ribera de Chapala. Inició a las 19:00 horas del sábado 26 y terminó al filo de la medianoche del domingo 27.
En total, en este despliegue se realizaron 464 pruebas, levantándose seis folios y doce personas fueron retenidas y enviadas al Centro Urbano de Retención Vial por Alcoholimetría (CURVA), ubicado en el municipio de Zapopan.
Cabe mencionar que este es el tercer dispositivo que se realiza en carreteras desde que se inició el operativo “Salvando Vidas” en noviembre de 2013. Los dos operativos en carreteras anteriores se montaron en la carretera a Chapala.
Habituados a que este tipo de revisiones sólo se efectúen en la zona metropolitana, los automovilistas se mostraron sorprendidos y hasta cierto punto molestos, manifestó el comisario general de la Policía Vial, Francisco Poe Morales.
“Es un programa para traer bienestar a las familias; mucha gente se molesta todavía porque los detenemos, bajamos (del vehículo) a la familia, aunque sepan que les estamos salvando la vida, porque en carretera manejar con alcohol y a exceso de velocidad es fatal”, expuso Poe Morales.
Lamentó que mucha gente todavía no entienda lo peligroso que resulta ese mal hábito y, por otro lado, explicó que, en el caso de los operativos en carretera, dejar a merced a las familias es responsabilidad de quien conduce alcoholizado, no de la Policía Vial, y la ley tiene que aplicarse.
Cuando en carretera un automovilista da positivo a la prueba de alcoholemia, la familia que lo acompaña es trasladada a un punto cercano a la zona metropolitana para que tome un taxi o pida ayuda a otro ser querido. BP
