A una semana de que se difundiera un video en el cual varios agentes paquistaníes golpeaban a sospechosos de robo, el Tribunal Supremo local ordenó el cierre de todas las celdas policiales de tortura.
Asimismo, el Supremo instó al Gobierno de la provincia oriental del Punjab, donde ocurrieron los hechos, a que abra expedientes disciplinarios a los policías involucrados en los malos tratos a los detenidos, según el canal Dawn TV.
La policía, algunos de cuyos altos mandos han comparecido ante la corte, negó los hechos y alegó que los medios de comunicación han magnificado lo sucedido.
Una fuente judicial restó trascendencia a la decisión de Supremo al observar que la tortura «ya está prohibida por la Constitución paquistaní», por lo que «no es nada nuevo».
Al menos cinco agentes policiales fueron arrestados en conexión con la presunta tortura de tres acusados de robo.
Con información de Agencias