Colima.- Con los votos del PAN y Movimiento Ciudadano, este jueves se aprobó nombrar como sedes alternas los 10 ayuntamientos del estado para la sesión del Congreso del día 31 y 1 de noviembre donde se tomará protesta al gobernador interino bajo el argumento de que no se sienten seguros en el Congreso del estado.
Esta decisión de la Comisión que preside el diputado plurinominal del PAN, Luis Ladino, – sobre la inseguridad en el recinto legislativo – llama la atención luego que, fueron precisamente los panistas los que recientemente tomaron la tribuna del Congreso y quienes provocaron un conato de bronca en la tribuna, motivando que la anterior legislatura pidiera seguridad estatal.
El acuerdo señala: «Se aprueba como recintos oficiales alternos, indistintamente, los 10 palacios municipales de Armería, Colima, Comala, Coquimatlán, Cuauhtémoc, Ixtlahuacán, Manzanillo, Minatitlán, Tecomán y Villa de Álvarez, en sus domicilios oficiales, lo anterior para la celebración de la sesión ordinaria como colegio electoral el día 31 de octubre y la sesión solemne del día 1 de noviembre del año en curso en los horarios que se determine por la mesa directiva».
En la exposición de motivos, la Comisión de Justicia, Gobernación y Poderes de la LVIII Legislatura señala que: «por tratarse de un tema de suma importancia y para resguardo y seguridad e integridad de las y los diputados (…) Se considera necesario se autorice indistintamente como sedes alternas para la celebración de la sesión que como colegio electoral, deba llevar acabo el H. Congreso, así como para la sesión solemne a celebrarse el día primero de noviembre».
Es decir, donde más sino es en el propio Congreso para que los diputados realicen un acto de tal importancia, además de que esta diseñado para controlar el acceso y hasta cuenta con un número de asientos establecidos.
En la realidad, es más inseguro un recinto municipal no diseñado para un acto de esta naturaleza que el propio Congreso.
La última sesión ríspida que se celebró en el Congreso del Estado, fue la del 21 de septiembre del 2015, en donde el senador panista Jorge Luis Preciado Rodríguez, irrumpió con el objetivo de que se suspendiera y no fuera aprobada la anuencia para que el Gobernador Mario Anguiano Moreno, solicitara un crédito por mil 598 millones de pesos.
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