Fernando Alberto Gutiérrez Fernández.
Con esta primera entrega inauguro mi colaboración con AFmedios, se trata de un breve preludio, menester para la orientación de los lectores entre los tópicos que a la postre habrán de tratarse.
Mi educación superior transcurrió en la licenciatura en psicología y hogaño soy estudiante de la maestría en ciencias fisiológicas de la Universidad de Colima, consecuencia de mi interés por la ciencia en general y particularmente por las neurociencias, en este rubro a mis 25 años he cosechado modestos productos.
Mi principal interés y colaboración ha sido en investigaciones relacionadas con los aspectos moleculares de los trastornos psiquiátricos y del mecanismo de acción de los fármacos que los palian, los productos físicos de estos trabajos están por ser publicados en revistas especializadas. En otros temas de neurociencias he sido co-autor de un artículo que recapitula el papel del sistema inmune en la regulación de la neurogénesis publicado en la revista “neuroscience”, así como colaborador de autor en un libro que compendia los conocimientos hasta hoy recabados respecto a los astrocitos. Mi tintero ha transpuesto las líneas de la ciencia y también ha plasmado colaboraciones literarias en suplementos culturales, y artículos políticos y de relevancia social en medios impresos locales.
Una de mis tentativas al escribir en este medio es la difusión de la ciencia, tanto en su quehacer local como nacional e internacional, en primera instancia como una corresponsabilidad con la sociedad que con sus impuestos financia nuestro hacer científico y también como una manera de recuperar la obligación del hombre de ciencia de promover la apropiación social del conocimiento, que por diversas razones y pretextos en su mayoría se ha perdido o relegado a espacios de difícil acceso o de poco impacto al grueso de la población.
Esta incapacidad comunicativa del científico es una de las principales causas de la raleza de espacios, de recursos y de nuevos elementos destinados a la ciencia. No es mi intención colocarme como portavoz de la comunidad científica local, por respeto a la diversidad de pensamiento y por mi calidad de estudiante, de hombre de ciencia en crecimiento, pero nunca revertiremos los efectos adversos que he descrito si no comienza ipsofacto el ejercicio de la comunicación.
Aun cuando mis horizontes trascienden a la ciencia y se han diversificado, han sido profundamente perfilados por el método científico, como naturalmente le ocurre a cualquiera familiarizado con esta visión epistemológica dando como resultado el científico una visión única del acontecer cotidiano. Mi tentativa secundaria es por ende repasar en mis artículos temas de política e interés general, donde mi objetivo será ofrecerles mi perspectiva, a momentos de rana, formada desde el extremo particular donde la circunstancia vital me ha colocado, con el objetivo de abonar a la policromía de opiniones y al contraste de las mismas en los medios locales. Bienvenidos.