El presidente Felipe Calderón reconoció la labor de la sociedad civil al otorgar salud y educación a quienes lo necesitan, aunque no sea su responsabilidad legal, sino del gobierno.
Además destacó su contribución para construir la democracia en México. “La labor perseverante de las organizaciones sociales, además, fue determinante para que México pudiera construir una democracia, porque su empuje y tenacidad contribuyeron a derrumbar los muros que no eran necesariamente los más democráticos”, logrando pluralizar la agenda pública, dijo el presidente Calderón al entregar el Premio Nacional de Acción Voluntaria y Solidaria 2010.
El presidente dijo que es responsabilidad del gobierno educar y trabajar para ampliar la cobertura en educación media de menos de 50 por ciento a 66 por ciento y la superior de 24 a 30 por ciento, “pero lo que hace una voluntaria o un voluntario enseñándole a alguien que no sabe leer tiene cualitativamente un significado mucho mayor, porque está fuera de su ámbito de responsabilidad legal”.
Además, dijo que mientras se han incrementado los servicios de salud de 47 a 92 millones de mexicanos, en respuesta a una obligación legal, “quien proporciona asistencia médica, quien ayuda al prójimo, tiene una dimensión humana distinta que precisamente es la que debe guiar la acción de los hombres”.
En Los Pinos, el mandatario federal celebró su encuentro con los voluntarios. “Qué bueno que hoy nos reunimos con los buenos y que los buenos son muchos, muchos más que los malos”, dijo. Y de paso se pronunció a favor de replantearse las prioridades presupuestarias en el gobierno y el Congreso donde, afirmó, cada quien piensa en su proyecto o sector, cuando lo importante es lo que se hace por los otros y eso no tiene el mismo apoyo político o administrativo.
Con información de Milenio.
