COLIMA.- Esta semanas se realizó un seminario sobre violencia contra las mujeres políticas, el cual estuvo impartido por Céline González Schont, quien presentó experiencias interpretadas como violencia de género en la política local de México durante el pasado proceso electoral 2020-2021, esto en el marco del XXXIII Congreso Internacional de Estudios Electorales que tuvo como sede física a la Universidad de Colima.
Según la perspectiva del feminismo de género, Céline González repasó que en la última década han proliferado estudios que, tras asumir lo que en su marco conceptual es violencia, detectaron reacciones negativas y violentas sobre el aumento de mujeres en puestos de elección popular debido a la implementación de la paridad o cuotas de género.
Lo anterior, comentó, ha hecho que se visibilice un nuevo tipo de violencia en el ámbito político; sin embargo, la violencia que según estos presupuestos experimentan las mujeres en el ámbito político, se ha englobado bajo múltiples conceptos cuyas diferencias nominales parecen sutiles, pero que en realidad tienen implicaciones de política pública distinta.
En este sentido, destacó dos enfoques relacionados: el primero es la violencia política en razón de género que, según este sistema de pensamiento, busca afectar los resultados político-electorales tanto en hombres como en mujeres, y el segundo es la violencia de género contra las mujeres en la política: “Se dirige a obstaculizar su participación mediante violencia psicológica, sexual, física, económica y simbólica”.
En ambos, continuó, los actores que comenten estos actos son sociales: votantes, familiares y parejas sentimentales, fuerzas armadas, instituciones de gobierno y funcionarios electorales, así como líderes de partido, candidatos y militantes.
En su proyecto de investigación, Céline González expuso que el 62.9 por ciento las candidatas a presidencias municipales consultadas dijo haber recibido mensajes o insultos a través de redes sociales durante su campaña política, mientras que el 8.2 por ciento dijo haber sufrido de violencia física.
Por parte de las sindicaturas, el 52.9 por ciento dijo haber recibido comentarios por falta de experiencia, perfil no adecuado o por no tener la escolaridad suficiente para el cargo, mientras que en la regidurías y cargos de concejales, el 40.9 por ciento dijo haber recibido comentarios ofensivos o descalificaciones; en estos casos fueron ejercidas principalmente por otro partido políticos o alguna persona vinculada al mismo partido de la candidata.
Para concluir su participación, dijo que en su estudio observó que la mayoría de las candidatas a una presidencia municipal, sufren mayor violencia que aquellas que participan para alguna regiduría o sindicatura.