Frente a un público mayormente de niños y niñas, Cuatro Milpas Teatro presentó “La víbora de la mar” en el Teatro Hidalgo, con el apoyo de la Secretaría de Cultura del Gobierno del Estado y el Fondo Estatal para la Cultura y Las Artes (FECA).
Esta obra creada y dirigida por Janet Pinela, relata la divertida aventura que viven Manuel (Christian Rangel), Pintora (Ariadna Galván) y Alejandrina (Flor Larios).
Los personajes se van encontrado poco a poco, aunque son personas que viven en partes distintas del mundo donde en un lugar puede ser de noche y en otro de día, tienen en común sueños por lograr y miedos por vencer.
Manuel es muy inteligente, desde pequeño su padre le exigió estudiar. Cada noche, cuando todo está quieto y oscuro, le gusta ver las estrellas, conoce cada una de las constelaciones. La Pintora alguna vez tuvo anhelos, cansada de su vida cotidiana, decidió emprender una búsqueda. Y Alejandrina es una hija mimada, sobreprotegida por sus padres, con muchas restricciones, a ella le gustaría aventurar.
Ellos estaban destinados a encontrarse. Una tarde en la playa la Pintora y Manuel se reúnen, Pintora necesitaba un toque de inspiración para seguir realizando arte, que encontró con las interesantes charlas de Manuel sobre las constelaciones y millones de estrellas que hay en el cielo.
Del otro lado del mundo, Alejandrina recibió una botella con un mensaje, que en resumen contiene los deseos de un chico que quiere compartir una noche de estrellas con alguien, Alejandrina queda cautivada con el texto y decide emprender un largo viaje para encontrar a ese chico.
La víbora de la mar, hizo reír a niños y grandes, es una historia contada de manera amena, sencilla y divertida. Resalta dentro de la puesta en escena la ingeniosa escenografía, las luces neón, que crean un ambiente propicio para la imaginación. BP