Playa del Carmen, Quintana Roo.- La Procuraduría Federal del Consumidor inmovilizó 3 mil 483 piezas de joyería con material plástico que se hacía pasar por ópalo, en 15 establecimientos en los que impuso sellos de suspensión de actividades por diversas irregularidades, en Playa del Carmen, Cancún y Cozumel, como parte de un operativo previo al inicio del periodo vacacional de verano.
Rafael Ochoa Morales, en funciones de procurador federal del Consumidor, encabezó un operativo de verificación en joyerías de la Riviera Maya para revisar la autenticidad del mineral, ante denuncias de que se comercializa mercancía apócrifa que no cumple con las especificaciones de calidad, origen e información.
Acompañado por el subprocurador de Verificación, Raymundo Rodríguez Diego, y por el director general de Delegaciones de la Procuraduría, Ériko Flores Pérez, Ochoa Morales solicitó a los encargados y dueños de los establecimientos la documentación que acredita el origen y autenticidad del supuesto ópalo que se comercializa en estos destinos turísticos.
Durante el recorrido se detectó que en el 100 por ciento de las 15 joyerías verificadas se vendía material sintético que se hacía pasar por ópalo sin conocimiento de los consumidores, lo que induce al engaño y confusión.
Además, en dichos establecimientos no se exhibía el tipo de cambio, no se ofrecían precios en moneda nacional y se vendían piezas de joyería en plata que no cumplen con las especificaciones que establece la Norma Oficial Mexicana para la venta de estos materiales.
Previo al periodo vacacional de verano, el Procurador en funciones recorrió locales comerciales, de renta de vehículos y servicio de taxis en el aeropuerto de Cancún, el de mayor tráfico internacional del país.
Se colocaron sellos de suspensión en el módulo de taxis de la terminal 2 del aeropuerto de Cancún por aplicar restricciones en sus servicios que no son informados con claridad a sus clientes.
B. P.