¿QUÉ VIENE?
Por: Sean Osmin HAMUD RUIZ
Trump, con su estilo, formas y razonamientos, vino a des-ecualizar armonías, ondas y frecuencias con las que se habían conseguido mantener equilibrios geopolíticos y económicos más o menos básicos, que al día de hoy solamente nos arrojan incertidumbre y dudas.
Uno de los factores que tenía algunos años influyendo en el comportamiento de los capitales y los poderes públicos en el mundo, sin duda era y es la guerra, dicen comercial (pero habría que agregar tecnológica, cultural y política) entre China y USA.
Este asunto venía manteniéndonos preocupados y observantes de la dirección que iba tomando, arrojando, por ejemplo, un fenómeno empresarial que creímos por un momento que nuestro país podría aprovechar enormemente, el Nearshoring.
Nos ilusionamos con atracción de enormes inversiones que se alojarían en el país brindando empleo, recaudación, crecimiento y desarrollo económico. Llamados a ser la bisagra mundial del comercio.
Pero se atravesó el demonio naranja.
Y entonces, la flamita de esperanza que se encendió con el Plan México, donde se enumeraban múltiples acciones que pretendían prepararnos para alojar industria al por mayor, titilea.
La posibilidad de contar con una mayor producción de energía limpia y sustentable, se pierde en el horizonte. Se aprobó en el congreso que el estado siga siendo dominante en este rubro y como cereza en el pastel, Pemex pierde dinero a borbotones, hasta en Deer Park.
De la construcción de decenas de parques industriales no se ha vuelto a oír noticia alguna.
Los aranceles a la importación de productos mexicanos en Estados Unidos sigue siendo la espada de Damocles.
Y para muestra de la trémula flama, un botón. En la visita este domingo de la presidenta Sheinbaum a Manzanillo, ninguna novedad o noticia de avance en el proyecto del vaso II del puerto, una de las inversiones anunciadas que probablemente fuera de las más estratégicas y necesarias para prepararnos a la relocalización. Lo relevante siguen siendo solamente los programas sociales.
Donald no es eterno y si bien es cierto puede causar daños profundos, nunca nada es irreversible, pero parece que acá ya asumimos que no hay alternativa y simplemente tendremos que comportarnos REACTIVAMENTE.
MICROCUENTO
Chicharrones y carnitas, frijoles, tortillas a mano, salsas, café de olla. Un almuerzo casi inmejorable. Y sucedió.
Una conversación libre, inteligente e informada consiguió que el momento rozara lo perfecto. Hay que seguir repitiéndolo.
