Con boletos agotados, se realizó una vez más la presentación de la obra “La Peor Señora del Mundo” dirigida y adaptada por Karelia Amezcua, con las actuaciones de 13 integrantes de la Compañía Infantil de Teatro Caracol, en el Teatro Hidalgo, bajo la organización del Gobierno del Estado a través de su Secretaría de Cultura.
Durante más de una hora, este recinto centenario y sus visitantes fueron testigos de las maldades de quien fuera considerada por su creador Francisco Hinojosa, La peor señora del mundo, quien echaba limón en los ojos de sus hijos, jalaba los cabellos, les daba comida para perros y golpeaba con el objeto que tuviera a su alcance a sus vecinos, sin importar sexo, edad, o fuerza. Una mujer muy temida que luego de amedrentar a todo el pueblo de Turambul tomó una sopa de su propio chocolate y terminó convirtiéndose en la mejor mujer del mundo, pues sus vecinos la hacían creer que haciéndoles cosas buenas ellos sufrían.
Una comedia que cuenta con un excelente reparto conformado por Andrea Espinosa como La peor; Adriana Rodríguez como Abuelo Goyo; Fernando Huerta en el papel de Don Pantaleón; Tamara Saldaña como Teté; Paulina Rodríguez como Ruperto; Ana Luisa Fletes en el papel de Casimira; Sara Buenrostro con el personaje de Doña Severiana; Andrea Martínez como Doña Cloc; Luis Bonales en el papel de Popeyo; Regina Ávila en el papel de Pía; Daniela Casas como Petunia; Paola Mendoza como Petrufo; Mayra Macedo en el papel de Geranio y la manipulación del títere de la paloma, a cargo de Javier Espiritu.
Es de destacar que esta puesta en escena cuenta con la colaboración de Javier Espíritu en la escenografía, asistencia de dirección y elaboración de máscaras. La iluminación de Luis Enrique Jiménez y la confección y diseño de vestuario de Karelia Amezcua, Javier Espíritu y Margarita Sánchez.
Una vez concluida la función, su directora Karelia Amezcua agradeció la asistencia al público, su apoyo incondicional a este montaje que ha tenido excelente aceptación por parte de los colimenses en todas sus funciones, y sobre todo, a los padres de familia por permitir que sus hijos tengan ese acercamiento a la magia del teatro, enseñándoles también que la disciplina y constancia con sinónimos de éxito.
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