Ciudad de México.- El rector de la Universidad Autónoma de México (UNAM) Enrique Graue Wiechers convocó hoy a los universitarios a cerrar filas contra la violencia que “indigna y lastima” a la UNAM, un espacio donde converge una comunidad cuyo espíritu es la libertad y la superación en el estudio y el conocimiento.
La seguridad de los universitarios, subrayó, es nuestra prioridad y juntos debemos afrontar estos embates que laceran la convivencia en nuestra Universidad.
En un mensaje a la comunidad universitaria, el rector pidió su solidaridad para denunciar todo evento que se presuma sospechoso o potencialmente peligroso para la seguridad; así como estar cerca de los jóvenes y servir de ejemplo para su desarrollo social integral.
“A nuestros estudiantes les solicito que se alejen de aquellos que distribuyen sustancias nocivas para su salud; que entiendan que ellos viven mundos ajenos a los nuestros, que no son sus amigos y que representan relaciones de peligro e inseguridad”, afirmó Graue al leer un mensaje a la comunidad universitaria.
También exigió que se lleve a fondo una exhaustiva investigación que conduzca al esclarecimiento de los actos de violencia por los que la UNAM se ha visto acosada en las últimas semanas y pidió que se detenga a los responsables.
Para ello, dijo, ha dado instrucciones a la Abogada general para que acompañe a las instancias procuradoras de justicia, presentado todos los elementos que se tienen al alcance.
Graue Wiechers aseveró que el camino que la UNAM ha tomado para garantizar la seguridad de su comunidad es el correcto, es un camino difícil, que indudablemente requiere mejorarse y reforzarse, pero es el mejor camino.
“En los días y semanas por venir se escucharán voces, internas y externas, que clamarán por otras alternativas más agresivas, que quisieran vernos o armados o militarizados; y no pocas aprovecharán los momentos político electorales que vivimos en nuestra nación para internar desestabilizarnos. Pero no lo lograrán si trabajamos en unidad”, subrayó.
En la Torre de Rectoría, ante el cuerpo directivo de la Universidad, el rector subrayó que es necesario decirles a esas voces que estamos conscientes de la fragilidad de la seguridad en nuestra Universidad como espacio plural, abierto y democrático, y que nuestra fortaleza está en el saber, en la libertad, en la autoridad moral, en la autonomía y en el respeto a la normatividad universitaria.
“Continuaremos actuando con estricto apego a la legalidad, cuidando de la seguridad de nuestras instalaciones, mejorando nuestra capacidad de disuasión y vigilancia, denunciando a los delincuentes y evitando, hasta donde sea posible, el ingreso de aquella violencia que pudiera acarrear más violencia”, insistió.
Graue Wiechers expuso que haber ignorado la inseguridad y el narcomenudeo no era una opción y solicitar su desalojo por las fuerzas policiales representa un riesgo de violencia armada en donde pueden salir lesionados inocentes y no por ello se podría garantizar la ausencia permanente de los narcomenudistas.
“Vivir constantemente en un estado de vigilancia armada nunca fue, ni será, una opción a considerarse”, subrayó.
En días recientes, prosiguió, la escalada de violencia alcanzó límites inaceptables. Una funcionaria universitaria fue baleada dentro de su automóvil en el estacionamiento de un campus en el Estado de México y el día de ayer, individuos ajenos a esta casa de estudios, presumiblemente narcomenudistas, escenificaron una riña y uno de ellos disparó contra dos sujetos hiriéndolos de gravedad, por lo que fueron trasladados al hospital de zona, falleciendo ambos.
Los occisos, agregó, han sido plenamente identificados y no son parte de la comunidad universitaria, y sostuvo que este último evento es, tal vez, consecuencia de las medidas implementadas por la Rectoría a fin de combatir el narcomenudeo en nuestras instalaciones.
Se han aislado espacios en que los narcomenudistas se habían aposentado, se incrementó la iluminación el diversas zonas, se amplió la vigilancia y sistemas de seguimiento y se estrechó la colaboración con las autoridades de la Ciudad de México, lo que ha permitido la detención, en las afueras de Ciudad Universitaria, de alrededor de 30 individuos.
Además, se han presentado las denuncias correspondientes a los distintos actos ilícitos cometidos dentro de las instalaciones.
Por todo esto, los narcomenudistas, dijo Graue, se han fragmentado y se han dispersado en otras zonas del campus central.
Resaltó que la Universidad no había sufrido actos de violencia entre grupos del narcomenudeo y es doloroso que los vuelva a experimentar.
“Como Rector, asumo toda la responsabilidad por el efecto colateral de las medidas adoptadas y también lamento mucho la muerte de estos sujetos, pues a fin de cuentas, su muerte es el producto de la desesperanza en la que está envuelta una parte de nuestra juventud.
“Yo les pido a todos ustedes, cuerpo directivo de nuestra universidad, que estemos atentos a los eventos que en los meses por venir puedan acontecer y que ante ellos actuemos con decisión, con prudencia y anteponiendo los intereses de nuestra Universidad”, remarcó.
El Rector estará de la mano con ustedes, con la Universidad y con los intereses de su quehacer académico, en un ambiente de seguridad, concluyó. BP