México.- Durante la promulgación de la reforma fiscal, criticada por la dureza con que se permite actuar en contra de los deudores de la banca, el presidente Enrique Peña Nieto indicó que a partir de este 2014 el sistema financiero hará del crédito un motor de crecimiento, pues con las reformas “el país contará con un sistema financiero sólido y robusto basado en el crédito responsable”.
Según el titular del Ejecutivo federal, al elevar el crédito, será posible aumentar y democratizar la productividad. “La reforma financiera facilitará que nuestros emprendedores tengan los recursos necesarios para hacer realidad sus proyectos productivos”.
Además, reconoció el trabajo de senadores y diputados, quienes aprobaron la reforma que permitirá que haya “más crédito y más barato”.
El Presidente explicó que con esta ley se buscan cuatro objetivos fundamentales: impulsar la Banca de Desarrollo para detonar obras, potenciar al campo y las exportaciones; respaldar proyectos productivos de empresas y emprendedores mexicanos; mejorar certeza jurídica de la actividad de agentes privados del sector financiero, a fin de que haya más crédito y que éste sea más barato; incrementar la competencia y por último fortalecer la solidez del sistema financiero.
“Se están generando condiciones para apoyar la creación de más empresas, pero también para que las existentes crezcan y se consoliden. Con más competencia entre los bancos, tendremos tasas más bajas, menores comisiones y mejores servicios”, subrayó.
Además, en su discurso Peña Nieto dijo que con más crédito y más barato, las micro, pequeñas y medianas empresas (MiPyMEs) del país, tendrán un insumo esencial para modernizarse, crecer y generar empleos, con lo que los hogares mexicanos tendrán mayores ingresos y los miembros de la sociedad puedan ganar más por su trabajo.
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