Este sábado, en el Museo Regional de Historia de Colima presentaron el libro bilingüe (español-náhuatl) “Hasta luego, señor sol • Tonaltzin satepan timotta”, de la autora Heidi Juárez Robles, editado por la Universidad de Colima. El libro aborda el tema de la infancia y el abandono paterno. Incluye ilustraciones de la propia autora y fue presentado por Alberto Llanes, Fernando Rodríguez y Ada Karina Robles Gómez.
Ana Karina Robles, directora general de Publicaciones, comentó que este libro es especial porque es el primero que la UdeC, en sus 84 años de vida, edita en español y náhuatl y que además está hecho para niños.
Fernando Rodríguez, director del museo, dijo que libros como el presentado ayudan a “echar a volar la imaginación en un mundo donde ahora los niños pasan horas viendo su teléfono o Tablet, consumiendo imágenes. Además, mantiene viva una de las lenguas más importantes de nuestra cultura, el náhuatl”.
Por último, Alberto Llanes relató cómo conoció a Heidi hace ya algunos años, en el concurso de literatura infantil donde ella participó. “En Hasta luego señor Sol, Heidi nos regala un cúmulo de emociones y de temas, empezando por el de la infancia, donde no nos debería de preocupar otra cosa más que jugar y divertirnos. La infancia es una de las etapas más importantes de nuestra vida para el desarrollo futuro y todas y todos deberíamos tener una infancia muy feliz”.
“También plantea en su libro la idea del abandono paterno -añadió-. Las ilustraciones, hechas por la autora, nos abrazan cálidamente y nos van llevando por este pequeño viaje literario donde nos reencontramos con nuestro Yo del pasado, ése que fuimos para convertirnos en lo que hoy somos”.
Antes de dar voz a la autora, Karina Robles leyó dos páginas del libro en español y el maestro Alberto Juárez en náhuatl.
Heidi Juárez Robles, psicóloga de formación, con estudios en la Universidad de Colima y experiencia académica internacional, narró que fue su papá quien la acercó a la lectura. “Él tenía muchos libros en casa, además de que solía llevarnos a la biblioteca y a las librerías. Por otro lado, mi mamá me inculcó el gusto por el dibujo ya que ella es dibujante y siempre me impulsó a hacerlo”.
Escogió el náhuatl “para reparar una herida histórica”. Gracias a este idioma, añadió, “regreso a mis ancestros”.
Comentó que, en la infancia, “todas y todos vivimos experiencias de sufrimiento similares a los personajes del cuento”. Y agregó: “Los cuentos son una linterna que llena de luz este mundo con un grito interno, por eso no importa cómo inicia, si no cómo termina. Como lectores, seamos buscadores de palabras que den fortaleza y aticen la llama de la vida y, en el trayecto, encontraremos los cuentos de otros como nosotros, sus formas de vivir, resistir y seguir avante en esta vida”.
El libro, además de encontrarlo en físico y a bajo costo, podrás descargarlo de manera gratuita en el portal de Publicaciones de la Universidad de Colima.